INFRAESTRUCTURAS

Fomento desbloquea el contrato para el arreglo del pavimento de la N-525

La Dirección General de Carreteras adjudicó la obra entre Allariz y Sandiás ocho meses después de licitarla

Ocho meses después de que se licitase el concurso, la Dirección General de Carreteras, organismo dependiente del Ministerio de Fomento, acaba de adjudicar el contrato que debe terminar con el mal estado del firme de la N-525 entre Allariz y Sandiás (entre los puntos kilométricos 210 y 217), uno de los tramos de la red viaria del Estado en la provincia con problemas de mantenimiento, con una sucesión de baches que convierten en un tormento la circulación por la carretera.

El contrato, licitado por una cantidad de 845.941 euros, fija un plazo de ejecución de dos meses desde la formalización del mismo, algo que se debe producir en los próximos días, una vez que se compruebe que toda la documentación presentada por la empresa adjudicataria (Obras, Caminos y Asfaltos S.A.) es correcta.

La rebaja propuesta por la compañía para ganar el procedimiento, al que se presentaron 27 propuestas, reducirá la inversión final de Fomento para el arreglo del firme a algo más de 533.000 euros.

El estado de la N-525 entre Allariz y Sandiás ha generado una gran preocupación entre los conductores, al condicionar la seguridad de los mismos. Los alcaldes de ambos municipios habían expresado en el momento de la licitación del contrato la satisfacción por la decisión de Fomento de intervenir en la carretera.

Durante la pasada primavera, la cantidad de baches y socavones en la vía había llevado a que estos se rodeasen de pintura blanca para remarcarlos.


Más tareas


La inversión prevista en este tramo de la N-525 debe completarse con otras actuaciones en la red viaria de la provincia, entre las que menos dinero ha recibido en el conjunto del Estado en tareas de reposición, la mitad de la media según las estadísticas publicadas.

En la misma carretera N-525, Fomento ha decidido limitar la velocidad entre Xinzo y Sandiás a 70 kilómetros por hora debido al mal estado del firme, una operación similar a la realizada en la A-52, entre el Alto das Estivadas y Verín y el acceso centro de la ciudad y el túnel de Alongos, donde el máximo permitido se ha situado en 100 kilómetros por hora.

La decisión llegó cuando Fomento ya ha adjudicado el contrato de conservación y mantenimiento de la autovía para los próximos años por una cantidad superior a los seis millones de euros, presupuesto que también se destinará a la mejora del acceso centro a la ciudad de Ourense. 

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