Los mejores dejaron volar la imaginación a la hora de disfrazarse y sorprendieron a vecinos y visitantes con sus trajes a la hora de pasearse por las avenidas de Madrid y Ourense, que estaban desde primera hora de la mañana llenas de público.
Los menores de Xinzo fueron ayer los protagonistas del Entroido en la villa. Primero participando en un gran desfile por las avenidas de Madrid y Ourense y después organizando una fiesta en la Plaza Maior, en la que no faltaron regalos, juegos, concursos e incluso espectáculo de malabarismo.
En el desfile, que comenzó pasadas las once de la mañana participaron un millar de niños que cursan estudios en los colegios de la villa. También se sumaron los que acuden a la guardería infantil y todos sorprendieron con sus disfraces al numerosos público que se amontonaba en las aceras, una gran mayoría padres y familiares que se apresuraban con cámaras de fotos para catar las mejores imágenes. El propio concejal de Cultura, Carlos Gómez, se mostró sorprendido con la alta participación y la vistosidad de los trajes de los alumnos. "É un dos mellores desfiles dos ultimo anos", aseguró el edil.
Los escolares partieron cada uno de su respectivo colegio para reunirse en el barrio de Villasana, que fue el punto de partida. La Policía Local cortó la carretera N-525 y señalizó rutas alternativas para los conductores ante el riesgo de que se registrase un accidente .
El desfile finalizó sobre la una del mediodía sin ningún tipo de incidente, ni la necesidad de que el Concello tuviera que recurrir a las carpas que tenían preparadas para proteger a los menores en caso de que comenzará a llover. "Temos varias carpas para poder continuar a festa en caso de choiva, pero non fixo falta sacalas", explicó Carlos Gómez.
La fiesta infantil continúo por la tarde en la Plaza Maior con juegos, regalos y varios espectáculos. Sobre las cinco de la tarde, el recinto estaba lleno de personas, la mayoría menores, pero también adultos disfrazados y bailando al ritmo de las charangas XL, BCB, Tocados, Achicoria, Compostela, TNT y Xituma.
Sobre las ocho de la tarde, a la celebración se sumaron las pantallas y numerosas comparsas, que abarrotaban las calles Lepanto, Galicia y la propia Plaza Maior, una de ellas integrada por varias familias que buscaban lugar para organizar la jura de bandera de un militar.
La afluencia de público y disfraces obligó de nuevo a la Policía Local a regular la circulación a lo largo de la carretera N-525 ante el riesgo de un accidente.
