Será gestionada por la Fundación San Rosendo, que estudia la posibilidad de crear otra en Lobios
El envejecimiento población en la Baixa Limia, con un 42% de la población mayor de 65 (3.225 de los 7.636 habitantes, según los datos del Instituto Galego de Estatística), han abierto un nuevo nicho de mercado en la puesta en marcha de viviendas comunitarias y residencias de mayores.
La comarca, que en el último año vio multiplicadas el número de plazas asistenciales (de 100 a 150, con un índice de ocupación que ronda el 100%), verá reforzado el servicio con la apertura de la nueva residencia que la Fundación San Rosendo está acondicionando en el antiguo colegio de educación infantil y primaria de la localidad. "Seguimos con los planes previstos, estimamos que entrará en funcionamiento hacia el verano, meses de junio o julio", destacan desde la fundación ourensana, al tiempo que reconocen que Aunque todavía no se han inicado los tramites para el registro, ya hay peticiones de posibles usuarios.
El proyecto, que cuenta con un presupuesto de 1,2 millones de euros tras la cesión del inmueblre por parte del Concello, permitirá habilitar 55 plazas en habitaciones dobles e individuales, además de salas comunes, de actividades y rehabilitación, además de una enfermería.
Proyecto para lobios
En esta línea de atender una demanda real y latente, los representantes de la Fundación San Rosendo -Benigno Moure, fundador de la entidad, y José Luis Gavela, presidente- se reunieron la semana pasada con el grupo de gobierno municipal del Concello de Lobios para tratar de avanzar en las negociaciones para la creación de una residencia de ancianos.
La visita transcurrió en un buen ambiente, en el que ambas partes manifestaron su interés por desarrollar una colaboración para el desarrollo de un proyecto asistencial "en una zona en la que sabemos existe demanda", destacaban fuentes de la fundación, que está en el ánimo de la fundación estudiar el proyecto, así como otros que tienen encima de la mesa. Para tomar una decisión, será clave ver como evoluciona la residencia que en 2014 abrían en Muíños, con unos datos de ocupación cercanos al 100%, y la de Lobeira.
Desde el Concello, la alcaldesa Mari Carmen Yáñez, señalaba la demada real y prioritaria de una residencia para la tercera edad "y que desde el Concello veníamos puesto de manifiesto desde hace tiempo", al tiempo que señalaba que Lobios es el único ayuntamiento de la comarca que carece de unas instalaciones asistenciales para la tercera edad. El proyecto, que se ubicaría en las inmediaciones de las piscinas o el pabellón en pleno casco urbano, contaría con más de 60 plazas y generaría un número importante de puestos de trabajo.
