La regidora pide "respeto" a su decisión y en el PP dicen no tener constancia de su posible afiliación
La marcha del BNG de la alcaldesa de A Bola, Teresa Barge, y cinco de sus concejales, suscitó ayer un aluvión de declaraciones sobre las razones que han llevado al grupo de gobierno bolés a tomar esta decisión y, especialmente, sobre su futuro político de cara a las próximas elecciones municipales. Precisamente, coge especial protagonismo la presentación, a final de este mes, de los candidatos populares de la comarca de Celanova, en la que se integra A Bola., para comprobar si finalmente aparece entre los aspirantes a alcaldes.
El portavoz nacional del BNG, Xavier Vence, manifestó que "respeta las opciones que pueda tomar cualquier persona", si bien sugirió que la "deserción" de la alcaldesa está relacionada con "operaciones de fichaje de alcaldes" del presidente provincial, Manuel Baltar, en referencia a Os Blancos y A Mezquita. Vence expresó su decepción por la marcha de Barge y también por el contexto, "parece que no puede moverse nada en Ourense si no es bajo la supervisión y control de la Diputación", dijo.
Desde Allariz, concello con el que A Bola comparte proyectos y servicios (Reserva de la Biosfera, Grupo de Desarrollo Rural, oficina de cooperativismo,...), el alcalde nacionalista Francisco García, no quiso entrar en polémicas con la que ha sido socia y compañera, asegurando que "manteremos o respecto institucional como xa fixemos noutras ocasións", pero si subrayó que "o BNG sigue sendo un instrumento imprescindible para Galicia e os intereses dos galegos".
Más crítica se mostró la ejecutiva comarcal del BNG Terra Celanova-Baixa Limia, que calificó la marcha de la alcaldesa como "unha simple estratexia de compra-venda de favores, por entender a política só dende a perspectiva da xestión municipal, non como un servizo ao que ten dereito toda a cidadanía, non como un instrumento para transformar a sociedade e camiñarmos cara a un mundo máis xusto" y destacan la apuesta nacionalista "pola organización territorial propia (concellos e comarcas) e non pola política caciquil e clientelar que se xestiona dende a Deputación". Los nacionalistas, que pidieron la entrega del acta a los ediles salientes, confirmaron la continuidad del proyecto bolés donde actuará de portavoz la concejala Dolores Martínez.
En el día después de anunciar su marcha, Barge quiso evitar enfrentamientos con su expartido y se mostró tranquila a pesar del foco mediático que ayer se centró en este municipio rural de 1.400 habitantes. "Para os veciños non foi unha sorpresa, porque xa levaban tempo preguntando onde iamos neste BNG", comentaba la regidora, que no quiso hablar sobre su futuro político, pero si pidió respeto a su decisión y matizó que "non entendo a política como un intercambio de favores. Nós estamos a disposición dos veciños, ao servizo da sociedade para xestionar o mellor posible os recursos municipais co fin de mellorar a calidade de vida dos cidadáns. Pero non ca misión tan importante de transformar a sociedade".
A pesar de que cada vez son más los rumores que la sitúan en las filas populares (fue militante durante el mandato de su progenitor, Luis Barge), nadie en el PP quiso confirmar ni desmentir la incorporación. "No me consta, pero supongo que la alcaldesa de A Bola y el PP de Ourense si adoptan algún criterio tendrán que explicarlo a los ciudadanos, tanto desde el punto de vista de la alcaldesa, como desde el punto de vista del partido en Ourense", comentó el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo. "No tengo nada que decir. Solamente respetar su decisión, que es de ella e intransferible", apuntó el secretario general Rosendo Fernández.
