Los vecinos tendrán la última palabra sobre la reproducción de la pieza robada el 9 de marzo
La iglesia valora la posibilidad de hacer una réplica de la imagen de la Virxe do Cristal que falta de la parroquia desde que el pasado 9 de marzo unos desconocidos asaltaron la casa rectoral y acabaron con la vida del párroco, Adolfo Enríquez Méndez, de 77 años y natural de Vila (Calvos de Randín).
El cura celanovés que temporalmente se está haciendo cargo de la parroquia de San Salvador de Vilanova, Antonio Gómez Galo, consultaba este pasado fin de semana entre los feligreses la posibilidad de realizar una reproducción "lo más parecida posible a la original, con la plata dorada y el cristal con la imagen interior, aunque en este caso sabremos por donde hemos metido la imagen, no como en la original que es un misterio, un milagro del siglo XVII", explica Gómez Galo. Este reconocía que "cuando sea la fiesta en el mes de septiembre, me gustaría que si no hubiese aparecido aún la original, contásemos con una replica bendecida por el señor obispo o por quien el estime oportuno". Y es que, la semana pasada, los feligreses que participaron en la fiesta de la Virgen "decidieron democráticamente y por amplia mayoría, no tener la procesión, un poco en señal de protesta por el robo de la talla", explicó Antonio Gómez.
Vivienda precintada
Los vecinos de Vilanova dos Infantes tendrán la última palabra a la hora de decidir si se hace la reproducción y de qué manera. "Les hice la pregunta y les dije que lo pensasen detenidamente, que lo mediten. Tanto si se hace como la forma de hacerlo, si es por suscripción popular, debido a la gran devoción a la Virgen de gente de fuera, o solamente la parroquia", matizó Gómez.
Con respecto a la investigación policial, pocos datos han trascendido tras las primeras semanas de trabajo por parte de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil y a la que se acaba de incorporar la Unidad Central Operativa. Especialistas en patrimonio artístico desplazados desde Madrid para colaborar en el esclarecimiento del homicidio del cura y dar con el paradero de la imagen.
La casa rectoral donde se perpetró el fatal suceso, permanece precintada y las visitas a su interior, previa autorización judicial, han sido contadas para no contaminar el escenario del crimen.
