La parroquia recordó al que fue su párroco cumplido el 20 aniversario de su fallecimiento
La parroquia celanovesa recordó ayer a dos de los nombres propios que han marcado la actividad social, cultural y religiosa de la villa. El primero, el de su patrón, San Rosendo. Sus reliquias, en su magnífica urna de plata del siglo XVII volvieron a presidir la procesión por el Claustro Barroco y la misa solemne oficiada por el obispo de Astorga, Camilo Lorenzo. El segundo, Manuel Iglesias Grande, que fuera párroco celanovés y hermano del actual, fue homenajeado al cumplirse el 20 aniversario de su fallecimiento con la presentación de una interesante biografía firmada por José Ramón Hernández.
Los actos festivos comenzaron, como viene siendo habitual en los últimos años, en O Vieiro. El alto que marca la línea divisoria entre Terras de Celanova y Baixa Limia albergó una nueva edición de la andaina por el Camino de San Rosendo. Su llegada a la villa casi coincidió con la alborada de la Banda de Música de Celanova que, junto con la Coral Solpor y el grupo de baile, amenizó la jornada dominical.
Certamen escolar
La iglesia conventual albergó los actos religiosos y culturales donde, además de la misa y la presentación de la biografía "Manuel Iglesias. Imagen del Buen Pastor en Tierras de Celanova", se sucedieron las intervenciones del vicario pastoral José Pérez Domínguez y de César Iglesias. El párroco local agradeció de las muestras de cariño hacia su hermano y al artista Baldomero Moreiras, por la donación de un cuadro de San Rosendo a caballo que ya preside una de las paredes de la sede de la Academia Auriense Mindoniense de San Rosendo.
Sin salir del templo, Iglesias Grande anunció la postergación de la entrega del "Premio de investigación Manuel Iglesias" a Enrique Cal a la sesión académica prevista para abril en Mondoñedo y presidió la animada recepción de los galardonados con el certamen "San Rosendo", entre los que se encontraban alumnos de Primaria de los colegios de A Merca, Bande, Cartelle, Celanova, Entrimo Lobios, Muíños y Ramirás.
Por la tarde, vecinos y visitantes tuvieron la oportunidad de disfrutar en la jornada de puertas abiertas a la Torre das Campás donde se enmarca la exposición sobre Rudesindus de José Antonio Ocaña, del triangular de fútbol sala en Pedra da Moa, así como de las últimas jarras de cerveza artesana en la feria que el pasado viernes se instaló en la plaza Maior.
