ENTREVISTA

Tavernier: "El cine tiene que ser social y político"

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photo_camera Bertrand Tavernier

El cineasta francés afirma tener  "un conocimiento íntimo del cine como enamorado de él, y también como creador, como director"

"El cine francés tiene `star system`, como todas las cinematografías, pero es también social y político", ha explicado hoy el cineasta Bertrand Tavernier, que ha presentado "Las películas de mi vida" en el BCN Film Fest.

En una entrevista, Tavernier admite que "Las películas de mi vida" tiene "algo de autobiografía visual", pero su propósito es también ofrecer "una perspectiva del cine, que no pretende ser académica, porque no tengo los conocimientos de los profesores universitarios, por los que tengo un gran respeto".

El cineasta exhibe, en cambio, "un conocimiento íntimo del cine como enamorado de él, y también como creador, como director", y en ese contexto ha querido hacer la película de un director sobre el cine, que sea a la vez "íntima y personal".

La película incluye 582 extractos pertenecientes a 94 películas de cineastas que le marcaron, desde los primeros, Jean Renoir y Jacques Becker, a Louis Malle, Jean Vigo, Marcel Carné, John Berry, o a Jean-Luc Godard, François Truffaut y Claude Sautet.

Tavernier dedica bastantes minutos de las 3 horas que dura el documental a Jean Gabin, un actor que "representa a Francia, a un espíritu francés, a un compromiso con su oficio, con su vida, que tiene un palmarés extraordinario y que hizo un gran número de películas formidables, con tantos directores de cine, y eso no es por casualidad".

Gabin, añade Tavernier, es "un hombre que está en la base de algunas películas, que hubiera podido quedarse en Francia durante la guerra con las proposiciones que el gobierno de Vichy le hizo y que, salvando el chantaje que le hicieron los alemanes prefirió irse a Estados Unidos, pero volvió a Francia para comprometerse con las fuerzas de la Francia libre junto al general De Gaulle".

Según el director de "Hoy empieza todo" (1999) y "La muerte en directo" (1980), Gabin confirma que "el cine francés, como todos los cines del mundo, tiene un `star system`, pero también es capaz de mostrar su lado social, político, un cine que habla del país" y, de hecho, Tavernier intenta demostrar que ha descubierto Francia y ha aprendido a amarla gracias a estas películas y estos directores.

Como él mismo dice en el documental, todo comenzó en un jardín de la casa familiar, pero su pasión por el cine surgió en un sanatorio antituberculoso de Saint Gervais: "Allí me curaron, me inocularon la pasión por el cine, al mismo tiempo que la penicilina".

Insiste Tavernier en decir que las películas referidas en su documental son "sólo una parte de los filmes y directores que he adorado, porque estoy a punto de acabar ocho horas adicionales para una producción televisiva, que no tienen nada que ver con la película, con pasajes que son inéditos", aunque se queda en el mismo período, entre 1930 y 1970.

Justifica la finalización cronológica en 1970 porque "después me convierto en director y ahí hay un conflicto de intereses".

Jean Renoir y Jacques Becker son los primeros que le impactaron, pero al mismo tiempo mezclado con descubrimientos como Eddie Constantine. "Por suerte, el descubrimiento de la pasión no sucede de un modo tan preciso, descubrimos y admiramos en el desorden. No hay una especie de plan definido", confiesa.

Atribuye a los críticos el hecho de que el éxito de la "Nouvelle Vague" en los años 50 y 60 hiciera desaparecer prácticamente el cine francés anterior, "por ignorancia".

Otro de los actores destacados es Jean Paul Belmondo, que representa "la llegada de una generación joven, moderna, con mucho talento, pero llegó un momento en el que se pasó al cine comercial y entonces hizo pocas películas interesantes, mientras que Jean Gabin hizo películas interesantes toda su vida".

Tavernier pide "excusas" por no tener otro proyecto de ficción en perspectiva: "Crear ocho horas para la televisión exige dos o tres años de trabajo, pide un centenar de semanas de montaje y, después de haber visto más de 1.200 películas, no me queda mucho tiempo para lo demás", señala. 

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