Manel Vázquez, técnico del Arenteiro, cumple el domingo doce meses al frente de un equipo que está en plaza de ascenso
El domingo, en el derbi que el Arenteiro jugará en el campo de Espiñedo ante el Polígono, el técnico Manel Vázquez cumplirá un año en el banquillo del equipo de la villa del Orcellón. Debutó ante el Estradense y desde aquel primer partido el equipo no ha parado de crecer. La temporada pasada la culminó con el título en la Copa Diputación y en este curso, cuando se llevan 20 jornadas disputadas, el equipo se encuentra situado en puestos de ascenso a Tercera.
El balance que hace el técnico del conjunto carballiñés es muy positivo. "Estamos muy satisfechos con el rendimiento del equipo, tanto la temporada pasada, en la que hicimos una segunda vuelta muy buena que se culminó con el logro de la Copa Diputación, como con el trabajo de esta, una temporada en la que cambiamos el objetivo principal. Aumentamos la exigencia para tratar de competir con los mejores de la categoría y a estas alturas estamos en condiciones de soñar con hacer algo grande al final de la temporada", afirma Manel Vázquez.
Una de las mejores bazas que tiene el conjunto 'verde' es su campo de Espiñedo, un terreno de juego que se ha convertido en un fortín: "Es cierto, desde que estamos en el equipo en los encuentros de casa en liga solo hemos cedido dos empates y unicamente perdimos un partido, en Copa ante el Bande. Debemos reconocer que nuestra afición también tiene mucho que ver en estos números. El equipo ha trabajado muy bien pero debemo saber que todas las rachas siempre tienen un final", añade.
El entrenador que se muestra satisfecho de como esta trascurriendo esta temporada, aunque no quiere lanzar las campanas al vuelo. "Es verdad que si en agosto nos dicen que en la jornada 20 íbamos a ser colíderes con 41 puntos seguro que todos lo hubiéramos firmado. Aunque también sabemos que esta trayectoria no llega por casualidad, se debe al esfuerzo, al trabajo y al sacrificio que está haciendo este grupo de futbolistas, compitiendo todas las semanas, superando lesiones y sanciones y creyendo en sí mismo cada vez más".
Pero Vázquez también quiere dejar claro que "todavía queda mucho trabajo por delante y la experiencia nos dice que las segundas vueltas suelen ser mucho más complicadas, los equipos se refuerzan y quieren cumplir cuanto antes sus objetivos, y ello es una dificultad añadida. Por eso yo no miro más allá del partido cada domingo y en este caso pienso en el rival al que nos enfrentamos, el Polígono".
Los rivales por el ascenso
Finaliza el técnico 'verde' hablando de los rivales que les pueden pelear las plazas de ascenso, y aunque reconoce que "las quinielas no se me dan nada bien", afirma que "los que están ahora en las primeras plazas, más alguno que se puede sumar, caso del Porriño, es con los que pelearemos hasta el final".
