Tres detalles de calidad bastaron al supercampeón de España para doblegar al joven y peleón equipo ourensano
La lógica se cumplió en la central de Os Remedios. El Atlético, supercampeón de España, se impuso al Burgas por 1-3 en la tercera jornada de la Primera división de fútbol sala femenino en un partido en el que las madrileñas tiraron de oficio ante un equipo, el ourensano, muy resultón. Tres detalles de calidad bastaron al Atlético ante un Burgas que hizo lo que debe pedírsele, trabajar y dar la cara. Lo mejor es que por un momento el conjunto de Codeso soñó con luchar por el partido.
Este Burgas-Atlético era el más desigual de las últimas temporadas. Sin las ya 'lejanas' Vane y Nespereira, y con Iria Saeta en la grada debido a molestias físicas, la empresa para las ourensanas era tarea casi imposible. Pero el Burgas del futuro tiene buena pinta. Encajar el 0-1 a los 17 segundos de partido ante todo un Atlético parecía sinónimo de sangría y no solo no la hubo si no que las ourensanas plantaron cara.
El quinteto inicial del Burgas ayer sería una segunda o una tercera unidad en campañas anteriores. Bajo palos Antía Piñeiro, con Nerea de cierre, Candela y María Arias en las alas y Figo en el pivote.
Primera jugada. Intento de salida con el balón por el ala de María Arias, más que posible falta del Atlético y el ataque finalizó con el 0-1.
El Burgas se descentró. No era para menos, y entonces la falta de acierto visitante y la sensacional actuación de Antía en la meta y la raza de María Arias evitaron la escapada en el marcador.
El Burgas fue reaccionando al shock inicial. El balón apenas le duraba en los pies pero fue suficiente para primero sacudirse el dominio rival y después llevar peligro a la meta del Atlético. Lo intentaron Sonia y Candela.
En la recta final del primer acto el juego estaba igualado pero entonces la primera unidad del Atlético puso las cosas en su sitio. Un descuido defensivo significó el 0-2 de María Sanz en el minuto 17 y uno después la brasileña Ariane logró el 0-3. Descanso.
En la segunda mitad el Cidade de As Burgas salió muy enchufado. Las posesiones ya eran un poco más largas que en el primer acto y aunque al equipo todavía le falta aumentar la velocidad en la circulación obligó a recular un poco a un Atlético que mediado el periodo estaba con cinco faltas.
Dispuso de un doble penalti Figo a 6:15 del final pero Estela despejó con los puños y a dos del final fue María Arias la que inauguró el contador para las locales Ese 1-3 ya fue definitivo.
Victoria justa para el Atlético pero la lectura para las locales es muy clara: este Burgas y sus jóvenes van a dar muchas alegrías.
