El conjunto ourensano terminó la primera vuelta de competición invicto como local y mostrando un crecimiento en el juego que invita al optimismo
La primera vuelta de competición en la División de honor B ya es historia y el Campus Ourense ha hecho los deberes.
Situado en una cómoda sexta posición de la clasificación con 28 puntos, el conjunto universitario certificó el pasado fin de semana con una victoria ante El Salvador B la mejoría mostrada en el encuentro ante el Bathco de Santander.
Los números hablan de un Campus mejor que el de 2016-2017, con una mejoría en la elaboración del juego y el honor de terminar la primera ronda de encuentros invicto como local en la liga.
En una competición que ha dado un paso adelante en cuanto a competitividad y nivel de juego, los chicos de David Monreal se apoyan en cuatro claves para confirmar la evolución, a pesar de un inicio de temporada marcado por las lesiones y los problemas para encontrar a un talonador de garantías, dudas que ahora parecen diluidas.
EL BLOQUE LOCAL: JUGADORES DE CASA CON PESO
Acostumbrados a otras disciplinas en las que el cambio de jugadores complican la adaptación a inicio de curso, el Campus Ourense de David Monreal mantiene el bloque de jugadores locales con respecto a la temporada pasada. Los Abraham, Morty, Justin, Jaime, Guille o César son parte fundamental de un equipo que invita a ser optimista.
Un planteamiento lógico en el que los extranjeros marcan el toque de calidad en posiciones específicas y que hacen que tanto la calidad de los entrenamientos como el trabajo en los partidos marque un camino creciente.
LA DEFENSA: MEJORA EN EL ÚLTIMO MES
Zarautz marcó un punto de inflexión. Los ourensanos fueron otros en el choque siguiente ante Santander y ante El Salvador dejaron el casillero rival en siete puntos, con minutos en los que aguantaron con solvencia la presión de los vallisoletanos sobre la línea de ensayo. La llegada de Faalili, el nuevo talonador (el tercero de la temporada), también ha mejorado al equipo en esa faceta del juego.
EL ATAQUE: LOS MEJORES TRAS BURGOS
Hay que rendirse a la evidencia. El estilo de juego del Campus apuesta por la anotación y sin duda está saliendo bien por segunda temporada consecutiva. Los 48 ensayos del equipo en 11 jornadas demuestran la vocación ofensiva de un equipo que tiene en el neozelandés Jason Harvey a su referente con 19 ensayos, solo superados por el todopoderoso UBU Colina de Burgos, que marcha con 78.
LA ENFERMERÍA, VACÍA: SIN LESIONADOS, POR PRIMERA VEZ
Fue la gran novedad (positiva) del partido del sábado. No hubo jugadores lesionados en el partido y David Monreal pudo elegir a qué jugador situar en cada puesto. El resultado, un buen partido, de menos a más y que muestra el resultado del trabajo que se realiza durante la semana.
Los indicios son buenos, el Campus invita a ser optimista.
