El equipo ourensano inició la pretemporada regalando la primera media hora de partido a la Ponferradina y mejorando mucho con el paso de los minutos
Inicio lógico de la pretemporada para el CD Barco. Los valdeorreses compitieron y fueron de menos a más en el partido, pero cayeron ante un rival que aspira a ser puntero en Seguna B, la Ponferradina.
Lo peor del debut estuvo al principio. Incluso antes de empezar. Problemas administrativos dejaron el partido sin árbitro y tuvieron que ser miembros de los dos clubes los que asumieron la dirección del partido.
El Barco salió despistado, sin la concentración necesaria para mantener a raya a un rival con tanta calidad.
En el primer cuarto de hora lo pagó dos veces el Barco. Primero con un balón largo que los centrales no supieron despejar y que le cayó al peor enemigo posible. Yuri no desaprovechó el regalo y batió con facilidad a Cabanelas (0-1).
El segundo lo marcó Ríos Reina. Cruzó con calidad desde el vértice del área. Imposible para el partido del Barco (0-2). Duro castigo para un Barco inferior en el juego y con muchos problemas para tener la posesión de balón.
"Salimos despistados y eso es lo que menos me ha gustado de este primer partido. Sin concentración y con muchos fallos en la salida de balón", reconocía el técnico local, Javi Rey.
Mejoría local
De ahí en adelante cambió el partido. Y más aun en la segunda mitad cuando Rey introdujo ocho cambios y sacó ventaja ante un rival que solo disponía de 16 jugadores.
Pero antes todavía llegaron dos goles mas. Y en la primera mitad.
Cabanelas se lució a un cabezazo rival pero Yuri aprovechó el balón muerto para fusilar en el área pequeña (1-3).
En el último minuto de la primera mitad Rely Cabral fue más rápido que sus pares y se plantó en el área rival para, con un buen disparo, hacer el primer gol del Barco 2017/2018. Antes el delantero ya había tenido una buena ocasión sin el mismo premio.
En la segunda mitad, el Barco estuvo mejor y por momentos dominó el partido. Le costó crear ocasiones claras de peligro pero sí estuvo más equilibrado y fiable.
Mitogo y David Álvarez tuvieron las mejores oportunidades para recortar distancias.
"Me quedo con lo positivo, con que el nivel de los jugadores nuevos nos hace pensar que tenemos un buen equipo y que si trabajamos bien podemos aspirar a completar una buena temporada", resumía Javi Rey.
El próximo partido del Barco será el sábado y de nuevo en Calabagueiros. El rival será otro equipo de Tercera División, el recién ascendido Ourense CF.