CARRERA POPULAR

"A entrenar llevo móvil y DNI"

San Martiño Manuel Fernández Ledo
photo_camera Manuel Fernández Ledo, tras entrar último en la San Martiño de 2017 según el crono oficial.

A sus 83 años, Manuel Fernández Ledo cruzó último la San Martiño 2017 y explica que para estar en forma entrena dos días a la semana y "siempre localizable"

Los aplausos animaban a Manuel Fernández Ledo a correr los últimos metros en Os Remedios. Era el último corredor oficial de la San Martiño 2017. Este padre, abuelo y "runner", oriundo de Cea y con 83 años, coge el teléfono apresurado sin geroscofobia. Presume de vejez.

 Se ríe sin parar cuando se le nombra la carrera popular. "Me lo paso muy bien, la verdad. Corriendo es cuando mejor me lo paso". En total, este ourensano gastó 1 hora, 22 minutos y 54 segundos en cruzar la línea de meta. Todo un hito personal y una costumbre vital de la que es testigo su familia. La edad invita a preguntar si el desgaste es grande, Manuel responde que "¿qué sufrimiento? Es una emoción, un sentimiento muy positivo". 

Carpintero, trabajador en una fábrica de calzado y en una agencia de festejo, este ourensano volvió de Venezuela en 2003 y se interesó por el deporte ourensano. Su experiencia deportiva empezó en unas vacaciones. Corrió, se sintió bien y siguió hacia delante.

"Casi siempre soy el mejor en mi categoría en las pruebas , porque soy el atleta más veterano de la competición", dice con una sonrisa 

Ahora presume de medallero. "Tengo más de 140 medallas". Describe que las tiene en el salón de Campeonatos del Mundo, de Europa, de cross o de reconocimientos como el que le otorgaron la Cafetería Pabellón y otros patrocinadores de la San Martiño por ser el atleta más veterano. "Se lleva bien ser famoso", bromea.

Manuel pertenece al Ourense Atletismo de Veteranos y admite que para llegar a estar en forma va a correr dos días por semana. "Antes hacía más kilómetros con pendientes, pero ahora corro un poco más llano. Cuando entreno llevo el móvil y el DNI y a la familia les digo donde voy. Siempre estoy localizable, para que estén tranquilos".

Se le escapa una sonrisa al terminar la frase. Sabe que este domingo tiene una carrera más. Su hija le acompañará como siempre y el terminará, ¿último? "Eso me da igual, voy a disfrutar y a sentirme libre".

Llegó a Ourense en 2003 y su primera toma de contacto con la San Martiño fue un año después: "Casi siempre soy el mejor en mi categoría, porque soy el atleta más veterano". Nadie se atreve a desafiarle porque como él dice "hasta que el cuerpo aguante y las lesiones me respeten seguiré corriendo, porque así es como me siento bien". Desecha la opción de retirarse del circuito de carreras con la misma facilidad que sonríe y que termina carreras populares.

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