COB, Breogán, Palma, Navarra, Burgos, Palencia y Valladolid tienen seis derrotas y dispares sensaciones por juego y expectativas.
La liga llega al parón de la Copa más igualada que nunca. En una competición impar y en la que además Valladolid y Huesca tienen un partido aplazado, la mejor forma para clarificar número es el casillero de derrotas. No engaña.
Cinco equipo comandan la clasificación. COB y Breogán son los mejores y Palencia será líder por el average general cuando recupere la jornada de descanso. El Burgos ya está medido de lleno en la pelea y también con un partido menos. Completa el listado el Valladolid, pero lo pucelanos con dos partidos menos.
Todos ellos con seis derrotas encajas y dispares sensaciones por juego y expectativas.
Tres equipos más se suman a la pelea por el premio 'gordo'. Palma Air Europa, Navarra y Lleida son los equipos revelación de la temporada. Los tres con siete derrotas. Los recién ascendidos asustan por su estilo de juego, los pamploneses echan de menos a Sonseca pero Schreiber empieza a sumar y desde la próxima jornada estará también Moncasi. Y Lleida tiene talento, ilusión y un pabellón con 3.000 personas que lo empuja en casa partido.
Ninguno entrena en las quinielas para pelear el ascenso directo pero nadie se atrevería a descartarlos y mucho menos los querría como rivales en una primera ronda de play off que ya genera sudores fríos a meses de empezar.
Ocho equipos y una plaza vacante para sumarse a la post-temporada. ¿Melilla?, ¿Coruña?, ¿Oviedo?.
Un respiro en la Copa
La Copa será el mejor momento para hacer un 'pit-stop'. Acoplar a jugadores con menos bagaje de entrenamientos, recuperar a lesionados o simplemente despejar la cabeza antes de afrontar el momento clave de la temporada.
Palencia y Breogán se juegan el título. Los palentinos son favoritos y alzar el trofeo es el peldaño más que suben cada temporada. Los lucenses tienen plantilla y baloncesto para ganar sin necesitar un recital. Una Copa igualada de antemano y por la que el COB peleó hasta el último segundo del último partido. Un título que pasa desapercibido para el resto del planeta pero que sabe a 'Champions' para los equipos implicados.
La mecha de encendido a una LEB Oro que sigue metiendo pólvora para la traca final.
