Los jugadores pontinos Martín Lamelas (L), Anderson Cruz (A) y Wadir Costa (W) son una de las mejores delanteras de la Preferente y clave para aspirar al ascenso
Martín Lamelas superó una grave lesión de rodilla para apostar definitivamente por el fútbol. Anderson Cruz empezó a jugar a este deporte en un barrio de Sintra (Portugal) imitando lo mejor posible a Naní . Wadir Costa reza a diario dando las gracias por lo que le ha dado y soñando con un futuro inmediato más cerca del fútbol profesional tras haber probado fortuna ya en un Segunda B como el Pontevedra . Los tres son una de las claves para entender por qué el Ourense CF puede ser el domingo equipo de Tercera. Tres delanteros y 42 goles. Lamelas, Anderson y Wadir redactan la ley de la liga, la ley del gol.
Solo el ourensano tiene su presencia garantizada ante el Gondomar en O Couto. Wadir es baja por acumulación de tarjetas: "Es una pena. Será un partidazo, pero no pasa nada. El equipo está preparado para este partido y no se nos va a escapar, seguro". Anderson es duda por una rotura fibrilar: "Creo que voy a estar. Es una recuperación delicada pero espero llegar". El club lo ha desplazado a Ponferrada para que sea tratado por unos de los especialistas con mejor cartel entre los futbolistas profesionales.
Le toca a Lamelas asumir un poco más de protagonismo en un partido que no admite segunda oportunidad: "Si me toca marcar lo haré y si tengo que dar el último pase también. Haré lo que pueda para ayudar al equipo. Esta plantilla es muy joven y el 95 por ciento éramos nuevos, pero en la segunda vuelta ya se ha visto de lo que somos capaces". Coqueto y confiado en la calle. Eléctrico y competitivo en el césped.
Después de una vuelta completa, el Ourense CF recuperó la segunda plaza en la jornada anterior. Lo hizo en un partido inolvidable que se decidió en el descuento por 3 goles a 4. El Valladares tuvo un penalti para empatar tras el tanto ganador de Wadir: "Estaba con Paco (utillero) y le dije que no pasaría nada, que si Dios había querido que pasase todo eso en el partido del Arenteiro y en el nuestro no nos iba a fallar ahora. Llevo diciendo hace semanas que vamos a acabar segundos". Si es así mucho de culpa tendrán sus 22 goles y que lleve marcando en diez jornadas consecutivas: "Estoy haciendo récords que nunca había conseguido, pero me quedo con que todos los que he marcado son muy importantes y han valido puntos".
Wadir no negocia en los partidos. Serio y obsesivo con el gol. Cuando se relaja no cuesta sacarle una sonrisa sincera.
Lamelas lleva diez goles, pero la mayoría han llegado en la segunda vuelta. No es casualidad: "Tuve un problema de menisco y estuve seis meses sin jugar. Tomé la decisión de intentar ser futbolista, de probarme. Me lo tomé más en serio que nunca y empecé a trabajar en el gimnasio, a cuidar lo que como y a entrenar lo más fuerte posible. Me siento muy bien, y cada vez mejor".
Tanto que ya han sido varios los clubes que se han interesado por él para la próxima temporada. No se atreve a garantizar su continuidad en el Ourense CF, pero sí asegura que "no me comprometeré con nadie ni tomaré ninguna decisión sin hablar antes con Camilo (presidente). En este club me han tratado como una familia y le estoy tremendamente agradecido. Me hacen sentir muy especial". Y añade: "No pienso ni en la semana que viene, solo pienso en ganar el domingo como sea y que el Ourense CF ascienda a Tercera".
Wadir es la pegada, Lamelas la verticalidad. El talento y la magia los pone Anderson, uno de los jugadores más desequilibrantes de la categoría. Abierto, bromista y alegre. Con una mirada todavía juvenil y una sonrisa que obliga a responderle con otra.
Cada gol es una voltereta: "Se lo vi hacer a Naní, que era mi ídolo, y lo intenté yo. No recuerdo los años que tenía, pero era muy perqueño. No lo había entrenado, pero el primer gol que marqué ya lo hice. ¿El domingo? Creo que sí. Si la hago es porque habrán pasado cosas buenas".
Lamelas es el mayor y todavía no ha cumplido los 24 años. Futuro, todo. Son la ley (LAW en inglés) de su equipo. Estén dos, uno o ninguno, el Ourense CF tiene el domingo en O Couto una oportunidad inmejorable de regresar a Tercera. Ellos llaman la atención del equipo y de la liga, pero la clave es un equipo que no ha dejado de creer y que lleva 11 victorias consecutivas. Y eso no puede ser solo"gracias a Dios", que diría Wadir.
