El deporte no entiende de festivos, es más, el día 12 sirvió para arrancar tres jornadas de máxima actividad
Lleve tres y pague dos. Así fue el fin de semana deportivo ourensano. La festividad del 12 de octubre dejó una jornada más para cuadrar las citas del menú. Con los más jóvenes de la casa libres de responsabilidades, pabellones y campos bajaron la edad media de la asistencia.
Y es que el viernes cambio de entrenamientos por partidos para parte de la Tercera División de fútbol. Sentó a las mil maravillas. Tanto Barco como UD Ourense vencieron y convencieron en los duelos adelantados. Ambos siguen cotizando al alza y miran hacia arriba con ilusión.
Por lo demás, el puente del Pilar sirvió para que las competiciones más rezagadas sigan cogiendo ritmo, como es el caso de dos Primeras, la de balonmano y la de voleibol. En los dos casos con victorias meritorias para los representantes ourensanos.
Hubo borrasca meteorológica. Se notó, pero más bien en horario nocturno, lo que no afectó al normal desarrollo del deporte en la provincia. Una preocupación menos para el Open de Galicia de Golf, que después de meses de golpes por los campos gallegos, vivió su gran final en las instalaciones de Montealegre.
