El resurgir del Barco

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photo_camera El entrenador del Barco, Javier Rey, manteado tras lograr el ascenso a Preferente (2015).

El cuadro de Calabagueiros padeció el calvario de la Segunda regional en dos ocasiones 

Hay equipos como el Centro de Deportes Barco que sin llegar a desaparecer tuvieron que reinventarse y caer prácticamente a las catacumbas del futbol provincial hasta disfrutar del presente en la Tercera división.

El conjunto valdeorrés, tras su último paso por la Preferente en la temporada 1999-2000, regresó a la Primera regional en la que cuajó campañas tan flojas que desencadenaron en su primera experiencia en la categoría de plata provincial. Volvería a ser protagonista en Primera en la liga 2003-04 logrando el ascenso, y repitió en la 2007-08 como cuarto clasificado al ocupar la plaza del Polígono.

Su vuelta a la Primera iba a coincidir con la llegada de su actual presidente Nilo Ramos a un Barco que con un trabajo de hormiga consiguió su tercer regreso a la Preferente en la 08-09 y tras un año en Primera autonómica plasmó su cuarto ascenso dos temporadas más tarde.

En la temporada 2005-06 el emblemático Arenteiro fue campeón y recuperaba para la villa de Orcellón una categoría que merecía por historia y afición. Para sus vecinos del Maside esa sería su última presencia en la categoría.

El fútbol no fue ajeno a la crisis y las renuncias de los equipos comenzaron siendo más habituales hasta el presente. El Antela vivía su tercer y último ascenso y la economía hizo que el Polígono durante dos años consecutivos dejara su lugar al modesto Melias, que luego fue capaz de permanecer dos años en la categoría autonómica.

El refundado Atlético Vilamarín, que en la campaña 2008-09 fue capaz de ser campeón de liga y Copa Diputación, después de muchas idas y vueltas renunció a jugar en la Preferente como en su día lo hizo su antecesor, AD Vilamarín. Esta decepción dio paso a la desaparición de aquel equipo que presidía y entrenaba Moncho Cuñarro, y que ahora, con una nueva directiva, se refundó en el Sporting Vilamarín.

Covadonga

El equipo del campo de Eiroás que en aquella liga 08-09 concluyó tercero pudo ascender al no dar ese paso el Atlético Vilamarín. El Covadonga, que tres años después pudo dar el segundo salto con el campeón Arenteiro, decidió ceder su plaza al Ponte Ourense, que había sido séptimo.

Las deserciones continuaron siendo la tónica en estos últimos años. El Melias, sexto clasificado, volvió a beneficiarse en la liga 2012-13 ante la renuncia del Nogueira, que un año más tarde, como bicampeón de Primera daba el penúltimo salto, esta vez junto al Verín. El Arenteiro que había acabado tercero y ya se disponía a seguir una temporada más en Primera, subió a Preferente gracias a la desaparición de CD Ourense, lo que condenó también a su filial.

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