TERCERA DIVISIÓN

El Sala Ourense, cinco partidos para un ascenso

photo_camera Los jugadores del Sala Ourense celebran un gol en Os remedios.

El Sala Ourense está a siete puntos de alcanzar la meta por la que lleva luchando dos temporadas, el regreso a la Segunda División B masculina

El fútbol sala masculino de la ciudad está a punto de regresar a la Segunda División B. Solo falta cerrar un ascenso que está muy encarrilado pues faltan cinco jornadas para finalizar la liga y los ocho puntos que el Sala Ourense lleva de ventaja al A Estrada y los nueve sobre el Pazos de Borbén le dejan a siete de culminar el objetivo por el que lleva luchando dos temporadas.

Dos victorias y un empate en cinco partidos, siempre y cuando no pierda por más de seis goles con A Estrada, le brindarían el salto de categoría sin mirar a sus rivales.
"Llegamos a la recta final de temporada en una situación privilegiada, y muy mal tenemos que hacer las cosas para no cerrar el gran trabajo que hemos realizado hasta el momento, pero falta certificarlo y el calendario es exigente. Podemos permitirnos dos fallos y muy mal tendríamos que hacer las cosas. En los dos partidos de casa y el siguiente en Lugo ante el Casás tenemos que apurar nuestras opciones, mal asunto si tenemos que jugarnos el ascenso en A Estrada o en la última jornada en la cancha de A Pontenova", asegura el técnico Kike García.

El técnico del Sala Ourense analiza los cinco rivales. "El Casás se está jugando el descenso pero tienen una buena pista y si hacemos nuestro juego nos debería beneficiar. El Vilalba será un rival muy peligroso, porque está yendo a más, y tenemos el precedente de su victoria en cancha del Pazos aunque en nuestra casa tenemos que sacar el partido.

El de A Estrada será un partido definitivo para ellos, porque si no son capaces de ganar se dejarán sus opciones de título. Coruxo nos pondrá las cosas muy difíciles, porque es el equipo que menos encaja, pero en nuestra cancha no podemos fallar. Para la última jornada, en A Pontenova, será mejor tener el trabajo hecho porque aquella cancha es terrible".


El proyecto


Kike García subraya que "la ciudad necesita un proyecto como este asentado en la Segunda B, para después a medio plazo poder pensar en llegar un poco más alto".

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