El delantero y máximo goleador del Barbadás, Rodrigo Parreira, llegó al club con la clara intención de abrirse camino y poder vivir del fútbol
Por sus goles le conoceréis. Así podría definirse a Rodrigo Miguel Dos Reis Parreira, un delantero natural de Lisboa, que con 23 años recaló en el Barbadás con la intención de abrirse camino en el fútbol español.
Antes de todo esto, Rodrigo Parreira, como se le conoce futbolísticamente en el equipo azulón, empezó a jugar con solo seis años en el Benfica, donde estuvo hasta los 16. Después firmó por Os Belenenses, donde, con 19 años, llegó al primer equipo y firmó su primer contrato profesional. La temporada pasada estuvo en el Operación Lagoa, un equipo de las islas Azores, que jugaba en la Segunda B portuguesa.Y de ahí, el salto al equipo ourensano.
El delantero azulón explica como fue su llegada. "Un intermediario me ofreció la posibilidad y no lo dudé. Me apetecía salir de Portugal y pensé que era el momento oportuno de dar el saltó al fútbol español. Además tenía muchas ganas de conocer y poder jugar en un fútbol que me gusta mucho".
Y fue llegar y besar el santo. En el primer partido liguero, marcó su primer gol al Bergantiños, y su equipo ganó 1-0. Rodrigo reconoce que "la verdad es que la adaptación fue muy rápida y sencilla, aunque tengo que reconocer que tanto mis compañeros como la directiva, me ayudaron mucho desde el primer día que llegué aquí".
El gol en las venas
El delantero azulón es el máximo realizador del equipo con diez goles, muchos de ellos decisivos. Aunque lo de marcar, no le suena raro. "Desde que comencé a jugar vivo para el gol, corre por mis venas y todas las temporadas suelo marcar bastantes. La temporada pasada marque 14 y en mi último año de juvenil en Os Belenenses hice 21. Desde pequeñito siempre marqué muchos goles y no me resulta raro".
Además, una de las sorpresas que se llevó Rodrigo, fue encontrarse con muchos compatriotas en el equipo ourensano."La verdad es que cuando firmé no contaba que hubiera tanto jugador de Portugal. Sabía que venía André, pero ninguno más". Aunque a la mayoría no los conocía, "solo a Igor Sevivas y al propio André, contra los que jugué varias veces".
Una de las cosas que más le llamó la atención al jugador lisboeta fue "el nivel del fútbol que tiene la Tercera. Yo diría que es como la Segunda B portuguesa, y sobre todo lo competitiva que es la liga, todos son buenos equipos, muy fuertes físicamente y que también saben jugar el balón con criterio".
Y finaliza afirmando que "me encuentro muy contento, me están saliendo bien las cosas, llevo diez goles y eso que el campo no me ayuda mucho, el balón siempre anda por el aire, pero aún así espero marcar 15 o 16 hasta el final de la temporada", finalizó.
