El jugador vigués, símbolo de la cantera de A Madroa para muchos aficionados, llegó a ser internacional en dos ocasiones con la selección española.
El centrocampista del Celta de Vigo Borja Oubiña ha anunciado este viernes, rodeado por el consejo de administración del club, cuerpo técnico y jugadores, que se retira del fútbol profesional, a los 33 años, tras no poder recuperarse de las molestias que arrastra en la rodilla izquierda.
El futbolista, que no ha podido jugar con su equipo esta temporada, pasó por el quirófano el 5 de agosto del pasado año para someterse a "una limpieza articular con extracción de cuerpo libres".
El jefe de los servicios médicos del Celta y médico de la selección española de fútbol, Juan José García Cota, estimó entonces que Oubiña estaría de baja un mínimo de cuatro meses, pero su reaparición nunca llegó.
Con el paso del tiempo el plazo de recuperación fue aumentando debido a que la evolución no era la deseada, pese a que el jugador se sometió a diferentes tratamientos. Durante los últimos meses Oubiña ha trabajado con los recuperados en el gimnasio, pero nunca logró incorporarse a la dinámica del grupo.
El jugador vigués, símbolo de la cantera de A Madroa para muchos aficionados, llegó a ser internacional en dos ocasiones con la selección española. Las lesiones marcaron su carrera desde que se lesionó, por primera vez, con el Birmingham en el 2007, en un partido de la Premier League contra el Liverpool.
Hasta en cinco veces ha tenido que pasar por el quirófano para solventar sus problemas de rodilla, los mismos que, coincidiendo con la finalización de su contrato, han precipitado su adiós del fútbol profesional.
Su último encuentro como celeste lo disputó el 17 de mayo de 2014 frente al Valencia en Mestalla, partido con el que ambos equipos cerraron la temporada 2013-14 y que ganó el conjunto valencianista por 2-1.
