Iago Aspas, eterno en el Celta

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photo_camera "Piña" by GRodal (CC BY-SA 2.0)

El delantero de Moaña espera seguir alargando su leyenda en el Celta, peleando por convertirse en uno de los mejores goleadores de la historia del club.

Iago Aspas es historia viva del Celta de Vigo. El delantero de Moaña espera ser esta temporada 2018-2019 la gran referencia del equipo, el hombre encargado de marcar la diferencia con su calidad y su fútbol cuando sea necesario, como lleva haciéndolo las dos últimas temporadas en las que ha sido nombrado mejor jugador del club.

A sus 31 años, el internacional español vive una segunda juventud, pues desde su regreso al Celta no ha parado de elevar sus cifras anotadoras, lo que le ha llevado a convertirse en uno de los mejores delanteros de LaLiga Santander. De hecho, tras la marcha de Cristiano Ronaldo del Real Madrid, Iago se posiciona como un posible vencedor del trofeo pichichi, en el que Lionel Messi parte como gran favorito en las casas de apuestas para lograrlo. Pero si el argentino no está muy fino de cara a portería esta campaña, podría ser el gallego el que se acabe llevando un galardón que no lo gana un español desde que el 2007-2008, cuando lo hiciera Daniel Güiza.

Recordemos que hace tres cursos, Aspas regresó al Celta, donde comenzó su reconstrucción como jugador tras dos temporadas sin apenas oportunidades en el Liverpool, donde marcó un gol y en el Sevilla, donde hizo 10. En su vuelta al conjunto vigués, el de Moaña comenzó desde el banquillo, pero rápidamente su situación se recondujo hacia una titularidad que se ganó a base de buen juego. En esta campaña Iago firmó 18 goles entre todas las competiciones. Una cifra más que digna que demostraba la vuelta del gran depredador gallego.

Los 26 goles, su récord personal

Después, en la siguiente temporada, el punta anotaría nada menos que 26 tantos, su cifra más alta en un curso. Lo haría gracias a la gran Europa League que el Celta jugó, lo que le llevó a saltar el césped en 49 partidos, 12 menos que en la pasada campaña, en la que el bueno de Iago marcó 23 goles para una media de 0.62 por encuentro.

Estas cifras demuestran que el delantero internacional español está en un momento dulce de su carrera deportiva, en su segunda etapa en un Celta que ansía que siga mejorando su rendimiento para elevar su leyenda a lo más alto del club. Por ahora, buscará ser el segundo ganador del pichichi vistiendo esa equipación, un mérito que solo se le puede atribuir por el momento a Manuel Fernández ‘Pahiño’, que lo logró en la 1947-1948 con 23 goles en 22 partidos.

Aunque, sin duda, este objetivo quizás sea demasiado ambicioso, pues no hay que olvidarse de que en esta Liga Santander, tal y como está estructurada, hombres como Luis Suárez, Lionel Messi o, incluso, Gareth Bale tendrán más posibilidades de ganar el pichichi al poseer detrás un equipo muy superior que juega prácticamente para que ellos anoten. Un potencial al que el Celta no se puede equiparar ni mucho menos.

A por su tercer Zarra

Sin embargo, un objetivo que parece mucho más asequible para el de Moaña es el trofeo Zarra. Este se le entrega al máximo goleador nacional que disputa LaLiga Santander y actualmente es el campeón de este, pues lo ha ganado en las dos últimas ocasiones.

Por ello, parece que si mantiene las cifras a las que se ha acostumbrado a marcar en el Celta, no tendrá mayores complicaciones para alzarse por tercera vez como mejor delantero español en LaLiga, lo que le llevaría a ser el primero en lograrlo tres veces consecutivas desde que este se comenzara a repartir en 2006. Eso sí, tendrá una dura competencia en equipos algo mejores que el Celta, lo que complicará mucho la posibilidad de conseguirlo.

Sus principales amenazas son sus compañeros de selección en la punta de ataque. No deja de ser una paradoja que los que comparten vestuario con él en la Roja sean a la vez sus competidores por un puesto de 9 con España y los que se pelearán por el trofeo de Zarra esta temporada.

El primer enemigo será Diego Costa. El hispanobrasileño del Atlético de Madrid se posiciona como el principal ariete rojiblanco para la temporada. Él ya sabe lo que es ganar un Zarra, pues lo logró en la campaña 2013-2014 anotando 27 goles. Estos hechos le posicionan como el principal rival para Iago Aspas, un delantero de gran calidad y con mucho olfato de gol, que pertenece al seguramente tercer mejor equipo del país.

A esto hay que añadirle los socios que Costa tendrá este curso en el Atlético. Y es que, tanto Antoine Griezmann como Thomas Lemar se posicionan como dos asistentes de lujo para él, dos hombres capaces de ver un hueco donde no lo hay, con muy buen pie para centrar y colocarle los balones en el área al killer del equipo. Una ayuda extra para un gran goleador.

El segundo es Rodrigo Moreno. El valencianista ya fue la campaña pasada el principal obstáculo que Aspas se encontró en su búsqueda del Zarra. Eso sí, al contrario que los otros dos, él no ha sido capaz aún de ganar este trofeo, por lo que no cuenta con la experiencia que sí que tienen tanto Iago como Diego.

Sin duda, su rendimiento irá medido en base a las rotaciones que Marcelino García Toral se verá obligado a hacer para no fundir a sus mejores futbolistas. Recordemos que actualmente el técnico asturiano cuenta en su plantilla con cinco delanteros, todos ellos de una gran calidad, lo que podría restarle minutos a Rodrigo si este no anda muy fino. Aunque, si está igual de acertado que la pasada campaña, en la que fue capaz de meter 16 goles, Rodrigo podría tener unas opciones muy serias de terminar como el mejor anotador español en LaLiga.

El año de marcar la historia

Por lo tanto, lo que Iago necesita es mantener el nivel de las dos últimas temporadas en esta para pelear tanto por el Pichichi como por el Zarra. Y es que, en el caso de que Aspas esté cerca de estos registros, no solo estaría inmerso en esa lucha, sino también en la de hacer historia en el club.

Actualmente Aspas ya se encuentra entre los jugadores más valorados del Celta, pero esta próxima temporada marcará la posibilidad de ver si se convierte en la gran leyenda que apunta a ser, o si, por el contrario, se queda como uno de los mejores futbolistas que han pasado por Vigo.

Por el momento, con sus 135 partidos en Primera División, aún está demasiado lejos de un Alexander Mostovoi que es el primero en cuanto a esta estadística con 235. Eso sí, en caso de tener un curso sin apenas lesiones, el de Moaña podría situarse cerca de ese Top 10 que cierra Santiago Castro Anildo con 187 encuentros a sus espaldas.

En ese tiempo el jugador celtiña ha marcado la friolera de 67 goles en LaLiga Santander, mérito que le posiciona en el cuarto lugar de los máximos realizadores en esta categoría en el club. Muy cerca está de los dos siguientes en la lista, Vladimir Gudelj y Mauro, que con 68 y 69, respectivamente, se verán superados este curso. Algo más lejos tiene aún Iago Aspas a un Manuel Hermida que con 104 tantos es el primero en dicha clasificación, sacándole 37 goles al punta de Moaña.

La otra clasificación en la que podría seguir creciendo es la de anotadores totales. Y es que, si podemos recordarlo, Aspas jugó algunas temporadas en Segunda División, lo que le convirtió en el héroe del ascenso del 2012 con sus 25 tantos.

Si tenemos en cuenta todas las cifras goleadoras de Iago a lo largo de su carrera con el Celta, el futbolista suma un total de 118 tantos, lo que le coloca como el quinto jugador con más goles en la historia del club, teniendo a solo uno a dos leyendas como Rogelio Tapia y Hermidita. Una vez haya superado a estos dos, Iago estará en un Top tres que por ahora encabezan Moncho Polo (166) y Manuel Copena (161), por lo que muy fino tendrá que andar en las próximas temporadas el punta celtiña para alcanzar las mayores cifras anotadoras de la historia del club de su vida.

Por lo tanto, la ambición que Iago Aspas pueda tener para esta próxima temporada está claro que no va a ser pequeña en ningún momento. Tiene ante sí la oportunidad de seguir haciendo historia y consolidar su leyenda como una de las mejores del Celta de Vigo, aunque para ello todavía debería pasar un par de cursos más con un nivel similar.

Eso sí, tiene abiertas grandes posibilidades individuales para conducir a su equipo a base de goles y buen fútbol a las primeras posiciones de una Liga Santander en la que cada vez está más caro pelear por Europa, siendo este el gran objetivo tanto del club vigués como del delantero de Moaña, volver a hacer grande al Celta y que este sea reconocido por todo el continente.

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