El 98% de los usuarios afirma que en caso de que suba el IVA reducirá su consumo, según un informe elaborado por encargo de las principales patronales de alimentación, distribución y la hostelería en las principales ciudades de España.
El comité de expertos para la reforma fiscal propuso al Gobierno que los productos y servicios gravados con el tipo reducido del IVA (10%) pasen al tipo general (21%), excepto en los casos de vivienda, turismo y transporte público. En el caso de que el Ejecutivo llevara a la práctica la propuesta, algo que pese a no estar descartado completamente el ministro Montoro avanzó ayer podría no llevarse a cabo, la práctica totalidad de los consumidores encuestados afirma que reduciría su gasto, en una o varias categorías de productos, según la encuesta, encargada por Cooperativas Agroalimentarias, Fiab, Aecoc, Anged, Aces, Asedas, CEC, Feher y Fehrcarem.
En un comunicado conjunto, las citadas organizaciones advierten de que los alimentos gravados al tipo reducido del 10%, como carne, pescado fresco, alimentos infantiles, aceite pasta o conservas, representaron el año pasado el 64,2% del gasto total de los hogares en alimentación (44.481 millones). "Esto significa que una reclasificación de los bienes sujetos del 10 al 21 % implicaría una factura adicional al consumidor de casi 600 por familia al año", añade la nota en alusión a un informe elaborado por una organización de consumidores. En opinión de las patronales de alimentación, la propuesta de los expertos sería las más "regresiva", ya que afectaría especialmente a las rentas más pobres de la población.
