Los arrestados pasarán a disposición judicial en un plazo máximo de 72 horas
Tres sacerdotes y un seglar han sido hoy detenidos por la Policía en el marco de la investigación sobre supuestos abusos sexuales cometidos en Granada contra, al menos, un menor, dirigida por el Juzgado de Instrucción 4 de esta ciudad andaluza, que prevé tomarles declaración en las próximas horas.
Los tres curas arrestados son el padre Román (R.M.V.C.), que daría nombre al conocido en ámbitos eclesiásticos como el grupo de "Los Romanones"; Francisco Javier C.M. y Manuel M.M., además del seglar Sergio Q.M., profesor de Religión muy cercano a los tres anteriores, según han informado fuentes de la investigación.
Los detenidos han pasado la mañana en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía de Andalucía Oriental de Granada, situada en la calle Palmita, y esta tarde han sido trasladados para un registro policial en un domicilio de Pinos Genil (Granada), donde han permanecido durante cerca de dos horas.
Se trata de un chalé ubicado en la urbanización "Los Pinillos" de esta localidad, situada a unos 10 kilómetros de la capital granadina y que correspondería a uno de los inmuebles usados por el grupo en algunos de los supuestos abusos denunciados, han indicado las fuentes.
Algunos vecinos de esta urbanización han detallado a los periodistas que ese chalé, conocido allí como "la casa de los curas" y en el que han visto "movimiento" en los últimos días, solía estar frecuentado por siete u ocho personas, que ocupaban con sus vehículos gran parte de los espacios para aparcar de la calle.
Los arrestados, que se encuentran incomunicados por orden del Juzgado instructor, que también ha decretado el secreto de sumario, han sido llevados en cuatro coches distintos camuflados desde la Jefatura de Policía, a donde regresarán una vez finalizado el registro policial.
Según el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, los curas y el seglar pasarán a disposición judicial en un plazo máximo de 72 horas, una vez que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado finalicen sus diligencias.
El abogado de los cuatro detenidos ha denunciado que sus clientes se encuentren incomunicados y ha considerado "desproporcionada" esa medida, prevista en el Código Penal y que les obligará a ser asistidos inicialmente por un letrado de oficio.
Al representante legal le resulta "llamativo" que el instructor haya adoptado la medida de incomunicación cuando es un asunto que está siendo investigado desde hace semanas y después de que el propio arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, citara en octubre a los implicados para tratar el asunto.
Por su parte, fuentes del Arzobispado han reiterado su colaboración con la Justicia y su ayuda a las víctimas si se confirman los abusos sexuales y han recordado que mantienen su posición de "tolerancia cero" con estas prácticas y con quienes las cometan.
Las detenciones llegan un día después de que el arzobispo de Granada se postrara ayer ante el altar mayor de la Catedral para pedir perdón por los "escándalos" que han afectado a la Iglesia y asegurara durante su homilía que "el mal es mal" y hay que "erradicarlo" de forma decidida si afecta a inocentes.
La causa tiene su origen en la denuncia que un joven de 24 años interpuso en octubre por supuestos abusos sexuales ante la Fiscalía, después de recibir en agosto una llamada telefónica del papa Francisco, que le pidió perdón en nombre de la Iglesia tras leer el escrito en el que le relató los hechos, ocurridos cuando era menor.
