"Pido el voto a los socialistas, los progresistas, los catalanistas no independentistas, a la gente que quiere que el `seny` retorne a la política catalana", dijo el candidato socialista a la Generalitat
El candidato del PSC a la Generalitat, Miquel Iceta, ha prometido ante empresarios catalanes que se ve capaz de "reconciliar a la sociedad y evitar el desastre económico de Cataluña", y ha recalcado su compromiso de que, si no logra acuerdos en dos años de legislatura, dejará la Presidencia.
Iceta ha pronunciado una conferencia dentro del ciclo organizado por el Círculo de Economía con motivo de las elecciones del 21 de diciembre, donde ha lamentado que la etapa de gobierno independentista ha tenido como "único resultado neto" el llevar a la sociedad "a la fractura social, el temor por el futuro de la economía y el fracaso político".
"Pido el voto a los socialistas, los progresistas, los catalanistas no independentistas, a la gente que quiere que el `seny` retorne a la política catalana. Pido que me voten porque puedo reconciliar a la sociedad y puedo evitar el desastre económico que todos los analistas preven si continuamos con un clima de incertidumbre y turbulencias políticas", ha señalado.
Como ejemplo, ha aludido al informe anual del BBVA sobre economía regional de España, según el cual "en 2015 Cataluña era la comunidad que más crecía, al 3,7 %. En 2016, la tercera (3,5 %). En 2017 será la novena (3 %). Y el año que viene, si se cumplen las previsiones y espero que no, será la última (2,1 %)".
Del mismo modo, refiriéndose a un estudio de Esade, ha alertado de que, a causa del proceso independentista, un 44 % de las empresas ha perdido clientes, un 56 % han visto bajar las ventas, un 31 % tienen clientes o proveedores que han cambiado su sede social y un 24 % han reducido la contratación de trabajadores, ha explicado.
Por ello, ha asegurado que su intención es devolver la "confianza" a Cataluña, a través de el impulso de medidas como más de 20 pactos o acuerdos sectoriales o "de país", entre ellos un plan de choque social cifrado en más de 3.000 millones o un Pacto de Estado para Cataluña, que permita "renovar a fondo el pacto del 78".
Pero ha dejado claro que él no espera un "cheque en blanco" como presidente. "Si decimos que la unilateralidad ha quedado descartada, no podemos decir que estaremos toda la vida esperando un pacto".
Por eso ha reiterado su compromiso de dejar la presidencia si a mitad de legislatura no hubiera alcanzado acuerdos. "Si en un plazo razonable de dos años, este presidente no alcanzara un camino razonable de objetivos concretos, habremos fracasado y deberemos ofrecer otro camino a los catalanes".
