Después de haberse desvinculado tajantemente de un documento que calificó de "delirante e inaceptable", Errejón ha lanzado este jueves un guante oficializando a través de Twitter su intención de presentar una candidatura de unidad que integre a todos
La cúpula de Podemos trata de digerir la conmoción provocada por el borrador que Carolina Bescansa atribuyó a un error de su equipo y que plantea a Íñigo Errejón participar en una operación para desbancar a Pablo Iglesias de la dirección, que se mantiene en silencio fuera de foco en busca de la salida a la crisis.
Un día después del desconcierto que cundió tras conocerse el documento, Íñigo Errejón ha tratado de enmendar la situación una vez que la propia Bescansa ha renunciado para no dañar al partido a ir de número dos en su lista para Madrid; oferta que el pasado lunes le formuló el exnúmero dos de Podemos pero que también él ya había dejado en el aire.
La dirección de Iglesias ha impuesto este jueves un 'apagón informativo' mientras clarifica cuál es la mejor manera de resolver la situación, pero considera lo ocurrido de "la máxima gravedad".
Aunque lo que no ha concretado es si a ese asunto grave responderá con medidas de calado.
El momento de esta crisis no podía ser más inoportuno, ya que este viernes se cumple el plazo para presentar las candidaturas provisionales a las primarias para que Podemos Madrid elija a su candidato y la lista que presentará a las elecciones autonómicas, y en este momento todo es incertidumbre
Después de haberse desvinculado tajantemente de un documento que calificó de "delirante e inaceptable", Errejón ha lanzado este jueves un guante oficializando a través de Twitter su intención de presentar una candidatura de unidad que integre a todos.
Y ha pedido al secretario general de Podemos Madrid, Ramón Espinar -próximo al sector de Pablo Iglesias-, y a la portavoz en la Asamblea regional, Lorena Ruiz-Huerta, encuadrada en la corriente de Anticapitalistas, que le acompañen en una lista unitaria.
"Si hace unos días era necesario, hoy ya es urgente. Podemos sacar al PP de la Puerta del Sol y construir un gobierno para todos los madrileños y madrileñas. Por eso he propuesto un acuerdo para una lista de unidad a Ramón Espinar y a Lorena Ruiz-Huerta. Nos tendrán en común", señalaba el diputado de la formación morada.
Pero su gesto de paz por ahora no ha tenido mucho éxito. Ruiz-Huerta ya ha rechazado públicamente el ofrecimiento. Dice que la oferta de Errejón no es una propuesta de "unidad", sino un "pacto de sillones" que se equipara a la vieja política.
Critica además que es un error que el partido haya convocado ahora -en plena crisis del Gobierno del PP en Madrid por el escándalo del máster de Cristina Cifuentes- las primarias, a las que Anticapitalistas ha decidido no concurrir porque cree que no garantizan la pluralidad
Se desconoce aún la respuesta de Espinar, que no está tampoco ante una decisión fácil.
El documento sin firmas, difundido ayer por Bescansa en su canal de Telegram, planteaba vetar a Espinar al señalar que no cabría su "integración" en una hipotética lista madrileña pactada con Errejón porque es el "portavoz de la corriente oficialista en la Comunidad de Madrid" y, por tanto, "representación más visible de la deriva política que esta candidatura aspira a contrarrestar".
Extremo contrario a lo que Errejón ha defendido siempre, que era integrar a todos los sectores del partido en una candidatura, en la que lo que pedía a la dirección era autonomía e independencia para poder dirigir la campaña e imprimir su estilo y sus propuestas como candidato.
Mientras la dirección no se pronuncie sobre la salida que va a dar a esta crisis todo son especulaciones, pero nadie niega que Podemos está ante una de las situaciones mas delicadas de su corta vida.
De momento, hay muchos interrogantes en el aire, tanto sobre el futuro político de Bescansa como sobre la debilidad en la que también queda ahora la posible candidatura de Errejón en Madrid.
