La sesión del jueves pasado, la última de marzo, se cerró con una subida del 0,48%, hasta alcanzar los 9.600,4 puntos
El Ibex 35 cerró la sesión del jueves, la última del mes de marzo, con una subida del 0,48%, hasta alcanzar los 9.600,4 puntos, lo que permitió al selectivo concluir la semana con un repunte del 2,21%, aunque no logró evitar que en el conjunto del mes del marzo se deje un 2,43%.
El parqué madrileño logró recuperar los 9.600 puntos en la que fue la última jornada bursátil de la semana.
En concreto, las mayores subidas de la sesión a cierre de mercados las registraron ArcelorMittal, que repuntó un 4,213%, e IAG, que subió un 3,114%. También concluyeron con subidas superiores al 2% Colonial (+2,957%), Mediaset (+2,352%) y Melia Hoteles (2,224%). Por el contrario, las caídas del pasado jueves estuvieron lideradas por Cellnex Telecom, cuyas acciones se dejaron un 1,632%, seguida por Gas Natural (-1,423%), Iberdrola (-1,191%), Acciona (-1,153%) y Endesa (0,941%). Entre el resto de valores, Bankia se dejó un 0,790% e Inditex, un 0,235%. Por el contrario, cerraron en positivo BBVA (+1,371%), Caixabank (+1,308%), Santander (+0,934%), Repsol (+0,769%) y Telefónica (+0,45%). En el resto de Europa, se mantuvieron la tendencia alcista al cierre de mercados, ya que la Bolsa de Fráncfort concluyó con una subida del 1,34%, mientras que París y Londres se revalorizaron un 0,72% y un 0,17%, respectivamente.
En los mercados de deuda, la prima de riesgo española se situó en los 66,7 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 1,16%. Mientras, en los mercados de divisas, el euro se intercambiaron por 1,2286 dólares. La subida del pasado jueves, junto con los repuntes del 0,99% del martes y del 0,86% del miércoles, permitieron que el Ibex 35 cerrara la semana con una subida del 2,21%, que contrastó con la caída del 3,76% que registró en la semana anterior.
El analista de XTB Jorge López señala que el Ibex logró cerrar en positivo la semana después de un inicio “bastante complicado”, donde el tono negativo de las sesiones anteriores se siguió prolongando en los mercados a nivel global “por la tensión política existente”, debido principalmente a una posible guerra comercial entre Estados Unidos y China.
Sin embargo, a mitad de semana se produjo un cambio a una tendencia positiva gracias a un PIB mejor de lo esperado, que reforzó la idea inversora de seguir contemplando un buen escenario macroeconómico que haga fuerza a la hora de consolidar nuevas alzas en los mercados. Esto permite ser “optimista y despertar algo de positivismo de cara a las próximas jornadas”.
