La exportación supondrá este año el 10 por ciento de la facturación de la compañía. Uno de sus principales clientes en el mercado extranjero es Japón
Los jamones de la compañía gallega Torre de Núñez se internacionalizan cada vez más. Al cierre de este año, la empresa lucense prevé que las exportaciones supongan el 10% de su facturación, una meta que logra tras años de trabajo en el mercado exterior y la presencia en numerosas ferias de alimentación para dar a conocer sus productos.
En la actualidad, la firma está presente ya en 17 países de medio mundo entre los que destacan Japón, Panamá, Hong Kong, República Dominicana, Guatemala y Noruega. El país nipón es uno de los más relevantes ya que casi un 20 por ciento del jamón curado importado por este país fue suministrao por Torre de Núñez con su propia marca.
El objetivo del grupo es seguir creciendo en el extranjero, para lo cual se está apoyando en agrupaciones como el Consorcio del Jamón Serrano Español, al que se ha incorporado recientemente y que garantiza la calidad de su producto mediante un sello de reconocimiento internacional. Por otra parte, la compañía acaba de fundar junto con otras empresas el Consorcio del Chorizo Español con el que pretende impulsar las ventas en países como Gran Bretaña, Alemania y México.
Torre de Núñez es una empresa de Lugo que lleva más de 40 años dedicada a la elaboración de productos cárnicos. En los 80 comenzó su expansión, lo que implicó la construcción de dos nuevas fábricas en la provincia dotadas de la última tecnología.
En el año 2005 puso en marcha un departamento de calidad y uno de exportación durante el ejercicio 2011 con el que la empresa aumentó su presencia en el extranjero y fue incluida en la Lista Marco para facilitar la venta a terceros países en el año 2013 y la obtención de los certificados sanitarios necesarios para exportar a Brasil y Japón.
La compañía elabora jamón serrano, embutidos, loncheados, lacones y pancetas, entre otros productos, que cuentan con certificados de calidad y con sellos que garantizan el consumo a colectivos importantes como el de las personas intolerantes a la lactosa o celíacas.
