Los artífices de este interesante proyecto editorial en gallego, Verónica Martínez y Vicente Fernández, desvelaron algunos de los secretos de esta empresa a la que los llevó su compartida pasión por la lectura
Novovinilo Edicións se presentó ayer ante la sociedad ourensana en el Centro Cultural Marcos Valcárcel, dentro del Foro La Región, mostrando su decidida apuesta tanto por el contenido, literatura de calidad; como por el contenedor, un libro mimado en los detalles. Los artífices de este interesante proyecto editorial en gallego, Verónica Martínez y Vicente Fernández, desvelaron algunos de los secretos de esta empresa a la que los llevó su compartida pasión por la lectura.
Verónica Fernández aportó algunos datos sobre el sector en España, destacando la pérdida, durante algunos años, de la publicación en gallego, aunque destacó que "en el 2015 hubo un pequeño repunte, debido sobre todo a los libros de texto y a la literatura infantil y juvenil". Abordó también el auge del libro digital y de las traducciones al gallego, subrayando que "el aumento mencionado nada tiene que ver con la asunción de riesgos".
Para Verónica Fernández es evidente que "es necesaria una mayor inversión en cultura y una política lingüística más favorecedora" y aseguró que "la fidelización de los lectores no pasa por el libro digital ni por el del texto".
Seguidamente, explicó cómo en Novovinilo "defendemos que en la lectura intervienen todos los sentidos del cuerpo". Definió la editorial como "nuestro sueño, en la que poder volcar nuestro amor por la lectura", y destacó que "el libro tiene que ser un nuevo vinilo, valorado como un objeto de culto, por eso nuestra idea es buscar aquellas ediciones de los años 70, dando importancia al diseño. No nos olvidamos del aspecto formal, apostamos por la literatura de calidad de los siglos XX y XXI".
El otro socio de la editorial, Vicente Fernández, habló de la primera obra que han publicado, "O enigma de Qaf ", del brasileño Alberto Mussa, "autor que es una verdadero referente en la literatura contemporánea de Brasil", explicó.
Vicente Fernández explicó que "queríamos arrancar con una buena edición, escoger bien las obras, porque son ellas las que van a fidelizar a los lectores, que sepan que van a comprar calidad y una obra que los va a satisfacer".
Confesó que "la obra nos escogió más a nosotros que nosotros a ella, en un viaje que hicimos el año pasado a Río de Janeiro". Contó cómo recorrieron diversas librerías hasta llegar a una llamada "Da Vinci" donde descubrieron a Alberto Mussa. Vicente Fernández desveló pequeños detalles de la trama como que "es una novela estructurada en 28 capítulos, cada uno de ellos dedicado a una letra del alfabeto árabe. Es una metaficción".Seguidamente detalló algunos aspectos del diseño que formará parte del sello de identidad de la editorial como "el logo que es una "V", un libro abierto" y dejó claro que se trata de ofrecer una "experiencia máxima a nivel de los sentidos".
