Los contertulios propusieron dudas y cuestiones que aclaró Emilio Ontiveros, el presidente de Analistas Financieros Internacionales
Los aplausos presidieron la reanudación del Foro tras la cena. Los contertulios propusieron dudas y cuestiones que aclaró Emilio Ontiveros, el presidente de Analistas Financieros Internacionales. La primera cuestión fue directa al grano. "¿Cuando recuperará el Gobierno de España el dinero prestado a los bancos? ¿Aumentará la inversión pública?". Respondió: "España tiene un stock de capital físico de los mayores de Europa. Tenemos unas infraestructuras físicas, que ya quisiera Alemania. Y no cabe descartar que el Gobierno recupere las ayudas dadas a la banca. Las más importante fueron a Bankia y ya está devolviendo una parte. La totalidad de la cuantía es muy complicado".
También fue interpelado por la conveniencia de unas nuevas elecciones pero Ontiveros opinó que la convocatoria de comicios "es un fracaso político, tanto para la sociedad como para la economía".
Ante la entrada en Europa de algún país o la salida de algún miembro, el economista recordó especialmente el caso griego: "Grecia suspendió el examen de selectividad y entró un año más tarde. No aprobó ninguna de las condiciones en una primera instancia. Francia se empeñó en que entrara a la Unión Europea y falseó los datos para aprobar el examen, y cuando cambió el gobierno en Grecia dijo que los informes de los anteriores gobiernos eran falsos. Gran irresponsabilidad. Grecia podía haber esperado, lo que ocurre es que sí sabemos como se entra en el euro pero no sabemos como se sale". No hay un manual de instrucciones, dijo, y el riesgo de una salida de Grecia es complicado: "El verano está a la vuelta de la esquina y los griegos tienen que solucionar sus problemas".
Sobre la posible salida de Reino Unido, Ontiveros auguró que "si el 23 de junio los británicos votan la salida de la Unión Europea, será un asunto serio para Europa y para ellos también. Perderíamos una potencia comercial y una región con uno de los servicios financieros más potentes. También para ellos sería particularmente grave". Sobre todo, recalcó, después de las ventajas conseguidas del primer ministro Cameron que nunca hubiera soñado la señora Thatcher".
Ante el temor de una nueva crisis, Ontiveros explicó que "el entorno económico es la fuerza más determinante. Creo que en España no tiene por qué haber, con la información disponible, un nuevo riesgo de inestabilidad bancaria. Pero no puedo decir lo mismo de otros países, pienso en Grecia o Italia".
Acerca de las diferentes políticas de la Eurozona y de Estados Unidos para paliar la crisis, opinó que "concurrieron distintos elementos. La crisis de Estados Unidos afectaba a las operaciones de crédito y sólo iba a contagiar a Europa a estructuras hipotecarias. Europa se preocupó de varios bancos franceses y alemanes y no calibró bien. El mercado mayorista se colapsó. Y no hubo reacción. Alemania no se dio cuenta de la deuda pública de Grecia, ni la de Portugal o Irlanda".
La bajada de impuestos y el coste de la energía también saltaron al debate. "La energía cara impide el crecimiento. Depende del contraste con los demás. El precio de la energía con respecto a otro país es un hándicap", dijo el ponente. Sobre los impuestos, cree que "sería un error reducirlos ahora, antes de saber quién va a negociar con Bruselas la bajada de la deuda". La recuperación del comercio local y de las pymes fueron otra inquietud. La recuperación del mercado local depende del gasto en consumo y sobre eso dijo que "hay algo más importante, la renta disponible de los españoles. La sociedad necesita incentivos para cambiar de sofá o de nevera", advirtió.
Acerca de las pymes, precisó que "el endeudamiento del tejido empresarial era elevado y las expectativas de ventas no eran buenas". Por eso, señaló, "la recuperación, no sé si 10 años, pero tardará tiempo. No es posible establecer una fecha exacta para que las empresas recuperen los recursos económicos que han perdido".
Además, detalló que la inestabilidad política "no es buena. Algunas industrias, algunas inversiones se han congelado esperando a ver quién dirige el Ministerio de Industria o de Energía. Los costes son elevados, pero no tanto como si estuviéramos fuera del euro porque el desastre sería total". Por ello, piensa que "sería bueno romper esa inestabilidad para que los ciudadanos recuperen la confianza".
