El 85% se registraron en la provincia de Pontevedra
Durante este periodo de tiempo el 112 recibió 2.158 llamadas y se se gestionaron 651 incidencias, el 58% (379) relacionadas con el temporal. El mayor índice de llamadas se produjo en torno a las 11.00, 13.00 y 16.00 horas, detallan fuentes de la Xunta.
Los municipios más afectados han sido Vigo, Pontevedra, Moaña, Nigrán, Redondela, Mos, O Porriño, Oia y Cangas.
En la provincia de Ourense se atendieron 27 incidencias, en la de A Coruña, 15, y en la de Lugo, 13.
La mayoría de las incidencias (en concreto el 25%) fueron provocadas por inundaciones en calles, el 16% por caídas de árboles, el 11% por anegamientos en viviendas y el 10% por desprendimientos de tierra y piedras, entre otras.
En el interior de la provincia de Pontevedra los valores están descendiendo, de modo que se ha pasado de la alerta roja a la amarilla.
Lo mismo sucede en la zona del Miño y las Rías Baixas, en Pontevedra, en el centro de la provincia de Lugo y en el noroeste de Ourense, también en alerta amarilla. Solo queda en nivel naranja por lluvia la zona orensana del Miño.
Para mañana se espera un temporal de viento de nivel naranja en la costa oeste de la provincia de A Coruña, con vientos de fuerza 7-8 y olas de 5 a 6 metros de altura.
El temporal ha obligado a la evacuación del centro educativo Sequelo-Marín, en Marín, por el desbordamiento del río que transcurre próximo a sus instalaciones.
Asimismo, ha sido necesario suspender las clases en las escuelas de educación infantil de Tremoedo (Vilanova de Arousa) y Samieira (Poio) debido a las inundaciones causadas por las fuertes lluvias.
Por la mañana, la Comisión Escolar de Alertas aconsejó a los centros educativos mantener un especial cuidado y seguimiento de los partes meteorológicos durante todo el período en que dure el episodio de meteorología adversa.
En el caso de que existan circunstancias que lo aconsejasen los directores podrán adoptar las decisiones oportunas respecto de la suspensión de la actividad docente.
La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras informa de varios incidentes en las carreteras, uno de los cuales se saldó con una víctima mortal en la VG-4.4.
En estos momentos hay dos cortes de calzada: en la PO-552, a su paso por Oia, y en la LU-125, en ambos casos por un desprendimiento de tierra.
También en la PO-552, pero en el municipio de O Rosal, la crecida de un arroyo en Viladesuso ocasionó problemas en la circulación que ya han sido resueltos; y en la PO-551, en el kilómetro 15.700, hubo un pequeño desprendimiento que no llegó a afectar al tráfico.
La OU-206 en Carballiño estuvo cortada provisionalmente por problemas en una canalización de saneamiento que desbordó.
La situación meteorológica complicó las tareas de limpieza de restos de un accidente múltiple que tuvo lugar en la A-55, a su paso por Tui, alrededor de las 14.00 horas.
Nadie resultó herido, pero durante al menos una hora el tráfico estuvo interrumpido en los dos carriles en sentido Vigo y uno en sentido Tui.
En Vigo, los bomberos tuvieron que rescatar a varias personas que quedaron atrapadas en el interior de sus vehículos a causa del aumento del caudal de agua en la calle Guixar y en la parroquia de Sárdoma.
Además, el desbordamiento del río Bouzos, en Cangas, obligó a los servicios de emergencias municipales a desviar su curso y evitar, de este modo, la inundación de las calles del casco urbano.
En la ciudad de Pontevedra, los servicios de emergencia tuvieron que intervenir en 35 incidentes por las lluvias.
