El Ejecutivo pagó cerca de 50 millones de euros entre 2010 y 2011 por aumento de los precios
El coste final de las obras recibidas por la Dirección Xeral de Infraestruturas en los ejercicios 2010 y 2011 superó "sensiblemente" el precio de adjudicación inicial, al pasar de unos 152,78 millones de euros a 200,39 millones. De esta forma, el incremento del coste fue del 31%, según destaca un informe sobre contratación administrativa entregado ayer al mismo tiempo que la Memoria del organismo en el Parlamento.
En el apartado de conclusiones sobre la contratación de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, el Consello de Contas observó que, de los 71 contratos de este departamento -hoy transformado en la Axencia Galega de Infraestruturas-, 59 (el 83%) vieron incrementado el precio por el que se adjudicaron inicialmente.
"También se observó cierta correlación entre la baja de adjudicación y la variación final del precio, de tal forma que la obtención de economías en la contratación a través de bajas considerables queda desvirtuada y compensada con los precios de las modificaciones contractuales, poniendo en cuestión la oferta económica tomada como base para la adjudicación del contrato", censura el organismo.
Junto al coste, Contas detecta que los plazos inicialmente proyectados para los contratos también sufrieron "dilataciones". Del análisis de la muestra de 77 contratos "se desprende que tan solo veintiocho fueron rematados en plazo". "Trece contratos acumulan retrasos de menos de 100 días, once contratos finalizaron con un retraso situado entre los 100 y los 200 días, y destaca la existencia de ocho contratos que acumulan más de 500 días de retraso", apunta.
A mayores, todavía sobre la actuación de esta consellería en 2010 y 2011, lamenta que aunque la ley creó el procedimiento negociado para agilizar el trámite de los contratos, esta "no se produjo".
