En Ourense se desplegarán entre 9 a 16 equipos de militares, en función de la alerta por incendios
El Ejército inició ayer su despliegue por los montes gallegos en el marco de la operación 'Centinela gallego' que se reedita cada verano desde su puesta en marcha en el año 2007 para luchar contra los incendios forestales. La Conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana, y el general jefe de la Brigada Ligera Aerotransportable (Brilat), Luis Cebrián Carbonell, asistieron en la base militar de Figueirido (Pontevedra) al despliegue de las patrullas, un mínimo de 25, que podrán ampliarse según lo requieran las circunstancias.
Rosa Quintana explicó que las patrullas del Ejército se distribuirán "en función de las zonas de riesgo", para que las labores de vigilancia se centren en "aquellas zonas de alta actividad incendiaria". En este sentido, recordó que el pasado año, hacia finales del mes de agosto, hubo que corregir la situación de los efectivos teniendo en cuenta estos datos, y una vez que "se hizo esa redistribución bajó el número de incendios en esa zona".
Ourense, la provincia más castigada por el fuego, estará dividida en tres distritos de vigilancia militar, Vaderorras-Trives, con entre 3 y 6 patrullas, en función del nivel de riesgo; Verín-Viana, de 3 a 5, y A Limia, también de 3 a 5.
El comandante Molina, jefe de operaciones de la Brilat, detalló que el convenio de este año "flexibiliza el redespliegue de patrullas", ya que el protocolo antes era más rígido y "ahora el jefe de la fuerza tiene cierto margen". La Brilat aporta veinte de esas patrullas, las otras cinco patrullas proceden del Tercio Norte de Infantería de Marina, con sede en Ferrol.
Quintana restó importancia a las condiciones climatológicas "ya que afectan a todo el territorio, pero no toda Galicia arde por igual. Luego, algo más tiene que haber". Por eso trasladó su deseo y confianza en que "la sociedad civil sea consciente" de la necesidad de vigilar y cuidar los montes.
Cebrián Carbonell aseguró que tiene la referencia de que las patrullas se realizan "en un ambiente amistoso", en el que las comunidades locales reciben a los militares "de forma muy positiva". También destacó la "utilidad" que tiene esta campaña para la prevención de incendios y acto seguido añadió que "es una buena ocasión para seguir manteniendo activos" a los soldados, "sobre todo cuando están en los cuarteles".
