PROTESTA

Las calles gallegas se unen en el dolor, “lumes, nunca máis"

Alrededor de 2.000 personas se congregaron en Ourense para pedir soluciones a los incendios

Galicia gritó bien alto ayer en las calles "lumes, nunca máis". Miles de personas respondieron a la convocatoria lanzada un día antes por el Comité en Defensa do Monte Galego en las principales ciudades gallegas, aunque tampoco quisieron quedarse en casa los vecinos de otros concellos de la provincia, como por ejemplo O Barco, Carballiño o Entrimo, donde también hubo movilizaciones.

Especial relevancia tuvo la manifestación en Ourense, donde hacía tiempo que no se reunía una cifra tan importante de personas para un acto de estas características. Desde la delegación territorial de la Xunta, en la avenida de la Habana, las alrededor de 2.000 personas que había, según miembros de la organización, recorrieron diferentes calles del centro. Un manifiesto alertó sobre las consecuencias económicas y sociales de lo sucedido este fin de semana. Aunque los principales lemas se centraron en reclamar un cambio en la política forestal, también hubo críticas a la gestión del Gobierno gallego y su presidente, Alberto Núñez Feijóo.

En Vigo, uno de los puntos más afectados por los incendios, acudieron a la movilización unas 3.000 personas. Participaron la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, la diputada en el Congreso de En Marea Alexandra Fernández y el secretario general de CCOO en Galicia, Ramón Sarmiento, entre otros.

En Santiago, varios millares de personas se manifestaron en contra de la política forestal de la Xunta.Dirigentes como el alcalde de Santiago, Martiño Noriega, el líder de En Marea, Luís Villares, el secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, no faltaron.

En Ferrol, se calculó la asistencia en unas 2.500 personas. Allí estaban, por ejemplo, el alcalde, Jorge Suárez, y su concejal de Cultura.

Fuera de Galicia

La numerosa presencia de gallegos en localidades como Madrid o Barcelona también dejó imágenes de concentraciones allí, dejando claro que la ciudadanía no quiere que se repitan este tipo de tragedias, que cada año se llevan por delante miles de hectáreas de bosque, truncando ahora también vidas. 

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