La mujer contactaba con asociaciones de niños enfermos para hacer sorteos solidarios, cuya recaudación nunca les entregó
Según ha informado la Policía Nacional en una nota de prensa, la detenida se puso en contacto, a través de redes sociales, con varias asociaciones de familias de niños con enfermedades poco usuales a las que convenció para hacer sorteos solidarios que ayudaran a financiar sus tratamientos y medicamentos.
Cuando logró la confianza de las familias, les pidió documentación y fotos de los niños para ilustrar las papeletas en las que, además, ponía el número de teléfono para que los que las compraban pudieran llamar y confirmar que los casos eran reales.
En total, realizó 9 rifas en las que sorteó 32.000 papeletas que vendía a un euro cada una.
Del mismo modo, la detenida habilitó varias huchas solidarias y llegó incluso a abrir una cuenta bancaria a su nombre en la que había 2.000 euros procedentes de donaciones.
La investigación comenzó cuando la Policía recibió en Vigo (Pontevedra) varias denuncias de familias damnificadas que explicaban, además, que la presunta estafadora había muerto, con lo que no podrían recibir la recaudación de los sorteos.
Posteriormente, los agentes descubrieron que la ahora detenida no había fallecido y que vivía escondida en casa de unos amigos en la provincia de Toledo.
