Mercedes Rosón, edil y candidata a las primarias para la Alcaldía, culpa al 'aparato' del partido
El PSdeG abrirá una investigación "rápida" sobre el inflado del censo de militantes de su agrupación en Santiago de Compostela en pleno proceso de preparación de primarias para elegir al candidato a la Alcaldía. La secretaria de Organización del PSdeG, Pilar Cancela, indicó que el resultado de la investigación, que prevé esté ultimada en una semana, será remitido a la dirección federal e incluso, "si correspondiese", también sería enviado "al ámbito penal".
La comisión ejecutiva nacional gallega se reunió en la tarde de ayer y analizó, entre otros, este asunto, después de que se conociese que la militancia socialista en Santiago se duplicó en los últimos meses. Cancela calificó de "tremendamente grave y preocupante" que hubiesen trascendido datos de la militancia, lo que vulnera el deber de custodia que recogen los estatutos del partido.
Puesto que ni la ejecutiva local ni la provincial han abierto una investigación, decidieron abrir en el seno de la Ejecutiva gallega un "proceso de información reservada". Se trata de esclarecer no solo la divulgación de datos de militantes, que pueden vulnerar" a su juicio, la ley de protección de datos, sino también el incremento del censo de militantes.
Críticas internas
Por su parte, la concejal y candidata a las primarias del PSdeG para la Alcaldía de Santiago, Mercedes Rosón, atribuyó al "aparato" local del partido el inflado del censo de militantes, que se multiplicó por dos en el último mes. En su comparecencia ante los periodistas admitió que invitó a familiares y a amigos a militar en el PSdeG, toda vez que el proceso de primarias está cerrado a los simpatizantes, pero calculó que con ello pudo haberse logrado un aumento de 50 afiliados.
Así, consideró que el "aparato" respondió con un inflado de la militancia en unos 250 más, por lo que presentó una queja para que se investigue este asunto. Preguntada por quién es competente para abrirla, señaló que el partido "con sus herramientas, y si no es así, la Fiscalía".
La concejal compareció para explicar, ante las últimas noticias sobre el inflado del censo, que la agrupación compostelana del PSOE fue tradicionalmente pequeña, con unos 300 militantes, y que era difícil darse de alta. Esto, debido a una "cuidada selección" que posibilitó que la agrupación permaneciese "en manos de unos pocos bien conocidos por todos".
Rosón abundó en que hace un año anunció en una asamblea de su partido su intención de concurrir a las primarias para la alcaldía y, ya que el proceso de primarias no es abierto a la ciudadanía, invitó a simpatizantes socialistas, amigos y familiares a que se "comprometiesen" con el partido y a renovar sus estructuras. Además, dijo que entraron en estos meses unas 50 personas "simpatizantes" socialistas y "animé a mi familia a compartir conmigo este proyecto" aunque, "desgraciadamente, las actas de mi marido y mi hermana" fueron "aplazadas por el aparato del partido desde el mes de noviembre" hasta hace unas semanas.
La "respuesta del aparato del partido no se hizo esperar: de golpe, en la última ejecutiva del 26 de mayo, último día" para elaborar el censo antes de las primarias, se presentaron 300 altas, lo que supone duplicar el censo de la agrupación y, tras las quejas de algunos miembros del partido.
De puño y letra
Rosón recordó que un periodista recibió fotocopias del censo con anotaciones de puño y letra que vinculan familiarmente a algunos militantes, "cuando todos sabemos las sagas familiares que controla esta agrupación desde hace muchos años". Destacó que este problema "involucra exclusivamente" a la agrupación de Santiago y subrayó que no permitirá que se mezcle la "progresiva" incorporación de "simpatizantes y amigos" al partido con "la respuesta del aparato de incorporar a más de 250 ciudadanos en un día". Por ello, envió una queja al secretario general, José Ramón Gómez Besteiro.
