PARA COMER

La Romántica

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Un intento de atraco convirtió en noticia de las páginas de sucesos a este restaurante ourensano

Un intento de atraco convirtió en noticia de las páginas de sucesos a este restaurante ourensano que conocí de la mano de unos amigos que me llevaron allí a cenar por primera vez hace ya algo más de diez años. Entonces me habían sorprendido sus raciones, como las que servían en los restaurantes portugueses hace treinta años, solo que en vez de arroz y patatas fritas, típicas guarniciones de los establecimientos de nuestro país vecino aquí eran patatas fritas y una refrescante y muy saludable ensalada de lechuga, cebolla y tomate. Nunca pregunté si había menú del día. La verdad es que resultaría imposible comer primero, segundo y postre, salvo que se comparta. 

La Romántica es un restaurante popular en todos los sentidos. Por su siempre numeroso público, por los precios y por la variedad de una carta con carne, pescado, pasta, etcétera en la que resulta casi imposible no encontrar un plato de tu gusto. El viernes pasado encontré mesa, yo creo que gracias a que llegué bastante tarde, pasaban de las tres y media. Pero la cocina trabaja a pleno rendimiento hasta las cuatro. Compartí una ración para dos de Cordón Bleu. Mi idea era tomar luego un postre, los flanes, por ejemplo, los hacen muy ricos. Pero lo cierto es que me planté y tomé solo un café, así que salimos por 6,50 euros por barba. En general, una comida con un plato y postre o entrada, medio plato y postre, ronda los diez euros. Es comer a la carta a precio de menú del día.

El servicio es extraordinariamente amable y subrayo este aspecto porque pese a ser un local siempre lleno, el exceso de trabajo no mengua el interés que prestan a cada una de las mesas que atienden.
Solo le encuentro una pega: la acústica del local no es muy buena. Esto hace que  cuando se llena resulta bastante ruidoso. 

En resumen, estamos con toda probabilidad ante  uno de los mejores restaurantes económicos de Galicia. Y no solo por el precio y la abundancia de las raciones. También por la calidad y el buen servicio de su personal.

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