Low visita Santiago este lunes, dentro del American Autumn, con el que es uno de los mejores discos de su carrera, “Double Negative”
Una de las bandas que más he admirado a lo largo de mi vida siempre ha sido Yo La Tengo y, en especial, a su líder Ira Kaplan. ¿Las razones? Muy simples: su constante reinvención y la ausencia total de prejuicios y complejos. No es fácil tener a tus espaldas más de 25 años de carrera y sonar “nuevo” y diferente a cada paso y disco que editas.
Lo que pasa con Kaplan es que atiende a una inquietud que lo desborda y lo hace único. Mientras, en otros casos similares de bandas en constante innovación, esta perpetua búsqueda responde a algo más espiritual. Una cruzada en busca de un grial musical que lo ilumine todo, una búsqueda de nuevas puertas, de melodías que dejen ver mundos que explorar. Y ahí está Low.
Low son los referentes únicos en esta especie de arqueología futurista, una rara avis en el mundillo alternativo. No se puede decir que sean una banda comercial, precisamente, pero cuentan con una legión de fans por todo el mundo que los seguirían en cualquier aventura a la que Alan Sparhawk y Mimi Parker los inviten.
Si hay una palabra que defina a Low es, sin duda, espiritualidad.Sobre el escenario su sonido minimalista va mutando todo el tiempo, sonando etéreo por momentos y volviéndose absolutamente desgarrador en otros. Su forma de tocar parece inalcanzable y la fragilidad con la que atacan los instrumentos puede llegar a crear ansiedad al público, sumido en el temor de que todo se rompa en cualquier momento. Pero, de pronto, esa sensación de inquietud desaparece cuando la banda les susurra, con acordes, que las melodías no entienden de fuerza, solo de belleza.
Este lunes, 1 de octubre, después de muchos años, Low visitará Galicia de la mano del American Autumn SON Estrella Galicia. Lo hará con el que parece será uno de los mejores discos de su carrera, “Double Negative” (Subpop récords). Aquí vuelven a darle una vuelta de tuerca a todo, sonando oscuros y experimentales. El lugar escogido es Santiago. Una ciudad llena de misticismo, espiritualidad y peregrinación. Una tierra que, como ellos, es promesa de una experiencia llena de reflexión y de búsqueda de uno mismo. Una cita que cualquier amante de la música y la belleza no se debería perder.
