"Dead Cells" ha ganado innumerables premios internacionales gracias a su adictividad, dificultad y el uno del exitoso método "Metroidvania"
En un momento en el que la realidad virtual y los juegos en 3D copan las listas de ventas, un juego en 2D tradicional ha copado halagos y premios en todo el mundo.
“Dead Cells” para PlayStation 4, Nintendo Switch y PC es un juego de acción tipo plataforma al estilo “Metroidvania”, en el que las diferentes salas de un castillo son accesibles según las habilidades, armas y capacidades que el jugador vaya adquiriendo a lo largo del juego. Sin embargo, lo que hace de este juego algo único es su componentes “Rogue”, ya que el jugador sólo dispone de una vida, por lo que al morir perderá todas sus armas y deberá volver a jugar desde el principio, aplicando lo aprendido para seguir creciendo y avanzando en el juego, explorando aún más el castillo un castillo que cambia después de cada muerte.
Esto hace que la sorpresa del jugador en las primeras partidas sea mayúscula, pero poco a poco zonas que parecen inalcanzables serán jugables, y partidas que duraban las primeras veces cinco o diezx minutos empezarán a alargarse, con respuestas y acertijos que aparecerán a medida que el mapa es explorado. No hay puntos de salvado (salvo cuando se abandona la partida estando vivo)
“Dead Cells” es un juego de acción de plataformas, con infinidad de armas, escudos y magias, adaptadas y seleccionables según la forma de juego de cada usuario. Con elemtos de clara referencia a clásicos como “Dark Souls”, “Metroid” y “Castlevania”, el juego invita al jugador a ser desafiante, a retarse a sí mismo y a disfrutar de cada sorpresa que se esconde en cada rincón del mapa.
La desarrolladora Motion Twin ha producido un juego imprescindible por méritos propios, que ha recibido hace pocas semanas el premio a mejor juego indie del año.
