La feria de electrónica y entretenimiento CES, que tiene lugar esta semana en Las Vegas, está poniendo de manifiesto la importancia que los fabricantes están dando a la calidad de imagen para incentivar las ventas de sus televisores
La feria de electrónica y entretenimiento CES, que tiene lugar esta semana en Las Vegas, está poniendo de manifiesto la importancia que los fabricantes están dando a la calidad de imagen para incentivar las ventas de sus televisores, en un mercado cada vez más competitivo y que apuesta por el salto definitivo hacia la ultra alta resolución 4K ( ocho millones de píxeles).
Samsung ha presentado su nueva gama de televisores QLED, con bajo el nombre de Q9, Q8 y Q7 suponen un avance más en la tecnología LED convencional. Entre las mejoras de estos paneles está una mayor profundidad en los tonos negros, un aumento del rango de color y sobre todo el incremento del nivel de brillo, factor clave para seguir avanzando en la carrera por conseguir el HDR más deslumbrante.
En este sentido, los nuevos paneles QLED frente a los 1000 nits (unidades de brillo) máximos teóricos de la generación anterior, aunque sobre la práctica alcanzaban los 1.400 nits, ahora Samsung afirma conseguir valores entre 1.500 y 2.000 nits y un 100% del espacio de color DCI-P3 (el estándar de color utilizado en señales HDR).
La otra gran tecnología que está abarcando cada vez más mercado es el de las pantallas OLED. a diferencia de las LCD, cada pixel de una pantalla OLED trabaja de manera independiente del resto tanto en color como en iluminación, lo que le permite un apagado completo de cada pixel por sí mismo, algo imposible en la tecnología LED. Esto permite obtener un negro absoluto, una de las características más valoradas por los especialistas en imagen.
Panasonic ha sido la primera en avanzar en la tecnología OLED con su nuevo panel EZ1000, basado en los panales fabricados por la compañía coreana LG. Esta pantalla permite negros absolutos y un brillo de hasta 800 nits, frente a los 550 de un panel OLED convencional. Otro de los aspectos mejorados por Panasonic ha sido la colorimetría de, pasando del 90% del espacio DCI-P3 a casi el 99%.
Sony también apuesta por esta tecnología basada en paneles OLED, con un modelo que saldrá a la venta a finales de 2017, mientras que LG avanza hacia una pantalla más funcional, con posibilidades profesionales, gracias a su capacidad de curvarla y mejorando las transiciones de grises en los tonos más oscuros de la imagen.
