El equipo ourensano afronta su tercera temporada con la idea de consolidar un proyecto respaldado por los resultados
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Todos los miembros del Burgas Coluer en imágenes
Con motivos para ser optimistas. Así afrontan la nueva temporada los componentes del Burgas Coluer Factory Team. Poco a poco van ganando experiencia. Están inmersos ya en su tercera campaña.
Y se han ganado un nombre dentro del ciclismo gallego gracias a su constante presencia en competición y sus resultados positivos en las diferentes modalidades y franjas de edad dentro del mundo de la bicicleta de montaña, especialmente en las competiciones de larga distancia, tanto en Galicia, España o incluso Portugal.
"Cada año empezamos la temporada un poco más pronto. En este 2018 lo hicimos a principios de febrero con una prueba en Escairón, antes hicimos alguna cosa en Portugal para coger ritmo, y a partir de ahora empiezan ya las pruebas más fuertes", destaca José Ferro, corredor pero también encargado de la coordinación del equipo ourensano.
En el horizonte, una sola palabra: mejorar. Cada uno se marca sus propios objetivos pero siempre pensando en progresar dentro de su especialidad. Seguir teniendo un papel fundamental en Galicia y reclamar protagonismo en el resto del país.
Uno de los éxitos del 2017 estuvo protagonizado por Delmiro Acevedo. Ni más ni menos que campeón de España de ultramaratón máster 30. "Hay más compañeros que están consiguiendo buenos resultados, pero sí, tuve yo la suerte de conseguir un título nacional y eso es lo que mejor se vende a la hora de presentar un dossier, de llamar puerta a puerta en busca de ayudas", señala Acevedo.
Patrocinios y visibilidad. Parte fundamental del proyecto. Por el momento funcionan. Importantes para que el proyecto respire salud. "Los artífices de la idea fueron Toño Rivas y Delmiro. Crear un equipo cien por cien ourensano, entrenar juntos y crecer poco a poco en un solo bloque", recuerda Ferro.
"En Ourense no había ningún proyecto en el que pudiéramos encajar. Estábamos repartidos por clubes de Lugo o Pontevedra. Pero habiendo gente en Ourense, siendo amigos, nos preguntamos por qué no organizábamos algo. Lo maduramos durante un año porque los inicios son difíciles, pero decidimos dar el salto. Estamos en una provincia con una gran tradición ciclista", señala Rivas.
Más que un equipo, una familia. Eso lo sabe Luis, que se encarga del avituallamiento, la asistencia técnica o simplemente los ánimos. Nunca vienen mal. Seguro que ayudan a que el Burgas Coluer Factory Team siga brillando.
