El canterano del Albor es el único ourensano que participa en el Plan Nacional de Tecnificación Deportiva de hockey sub 15, del día 11 al 14 en Madrid
Toca hacer la maleta. Por el momento es solo para participar en Madrid la próxima semana en el Plan Nacional de Tecnificación Deportiva de hockey sub 15, y solo para unos días, entre el 11 y el 14 de este mes, pero no le importaría que en un futuro fuese para poner rumbo a la meca europea del hockey hierba, Holanda. Es el sueño de Samuel Barreira Barreira (Ourense, 12 de junio de 2002), una de las promesas del Club Hockey Albor.
El potencial del jugador cadete no ha pasado desapercibido para los técnicos de la Federación Española de Hockey pues Samuel ha ido "pasando fases", hasta cuatro, dos en Ourense, una en Santander y otra en Gijón, para llegar a la fase final, la que reúne a las 24 mejores promesas del hockey español en la categoría sub 15. "No teníamos a un jugador del club en un stage nacional desde que acudiera Lucía Álvarez en 2010. Es un premio al trabajo del chaval y también para la entidad", señalan desde el Albor.
Samuel Barreira estaba "de compras en el Mercadona y me llamó mi entrenador (José Ramón Veloso) para darme la noticia. Pegué un salto enorme", asegura.
El canterano tiene claro que tratará de aprovechar al máximo esta concentración nacional para continuar creciendo como deportista: "Con algunos de los jugadores que me encontraré en Madrid ya me encontré en campeonatos con mi equipo y con la selección gallega. El año que viene tendré 16 y ahí ya se juegan torneos internacionales con España así como el Europeo. Sé que con trabajo y esfuerzo puedo llegar a tener oportunidades para llegar lejos en este deporte. Me gustaría jugar en un gran equipo español pero mi sueño es jugar en Holanda o Bélgica, donde el hockey es un deporte importante", afirma Samuel Barreira.
Al deporte del stick Samuel llegó casi por casualidad. "Empecé con el kung-fu y con la natación aunque estaba predestinado a ser jugador de balonmano, que era el deporte que más me gustaba. También jugué al baloncesto en el equipo del colegio pero me castigaban porque me ponía a mirar el entrenamiento del equipo de hockey. Me llamaba la atención la cantidad de niños que había, lo bien que se lo pasaban y el hecho de ser un deporte diferente".
Eso fue el primer contacto con el hockey pero el empujón definitivo fue una casualidad: "Entre la leña encontré en la aldea un stick de madera y me animó a probar, y hasta ahora. ¿El palo? No supieron decirme de quién era, me dijeron que sería de un bisabuelo mío", añade Samuel Barreira.
Sala y hierba
A pesar de ser cadete el jugador del Albor ya ha debutado con el equipo sénior, tanto en hierba como en sala. "Me gusta más el hockey sala, por tratarse de un juego más técnico y más físico, y en general por su rapidez, aunque sé que el hockey hierba tiene mucho más tirón", finaliza un canterano ourensano del Albor que sigue cubriendo etapas para ser uno de los destacados del hockey ourensano, gallego y quizá nacional e internacional.
