El vehículo, con un enorme valor sentimental para su propietario, había sido sustraído entre el viernes y el domingo
Final feliz para la historia de un robo. El Peugeot 205 y la plataforma de José Antonio Fernández Sanmamed apareció en la madrugada del lunes al martes en un monte de Xunqueira de Espadañedo sin desperfectos aparentes para alegría y tranquilidad de su propietario.
El amplio movimiento en las redes sociales, las batidas realizadas por amigos y familiares del piloto y el trabajo de los cuerpos de seguridad dieron sus frutos y el Peugeot vuelve a descansar en el lugar del que no debería haber salido.