El piloto de Pontedeva retornará a la competición con un mini programa de dos carreras a los mandos de un Silver Car EF10
El piloto ourensano, César Rodríguez, vigente campeón de España de la Categoría II en el nacional de Montaña, vuelve a enfundarse el mono de competición.
Después de un intenso invierno en el que a pesar de los esfuerzos no logró los apoyos necesarios para afrontar con garantías el asalto a la máxima categoría, el de Pontedeva siguió trabajando y ha conseguido cerrar un mini programa de dos pruebas (en principio) a los mandos de uno de los potentes Silver Car EF10 del preparador navarro.
La Subida a Alp, en Girona (13 a 15 de julio) y la Subida a Chantada, en Lugo (17 a 19 de agosto), única cita en suelo gallego del certamen, ambas puntuables para el Campeonato de España de la modalidad serán el escaparate para un piloto que ya tiene en mente la temporada 2019.
El objetivo, según el propio piloto es "conocer la conducción del nuevo Silver Car, adaptarme cuanto antes a las peculiaridades de un monoplaza tan diferente y con tanta potencia y comenzar a preparar la temporada 2019, en la que espero poder competir desde el inicio del certamen".
Para asaltar las dos pruebas, un monoplaza con más de 450 caballos, en concreto la unidad que utilizó el campeón portugués Pedro Salvador con excelentes resultados en el Nacional de su país.
La primera toma de contacto, en unos días en suelo navarro, ahí Rodríguez conocerá de primera mano el potencial de un vehículo que ya sabe lo que es ganar en pruebas del Nacional de Montaña y que tendrá como rival, entre otros, a su anterior compañero de equipo en el equipo BRC, el asturiano Javi Villa.
