Los usuarios confían más en losfabricantes de coches que en las empresas de tecnología o startup
Un estudio realizado este año por Deloitte Global Automotive Consumer y presentado en el evento "Driving Change" organizado por Carglass España en Frankfurt, pone de manifiesto la reducción de desconfianza por el público, al estar siendo aceptada a medida que se va desarrollando y llegando a los automóviles de calle.
La desconfianza en ser conducidos por un coche autónomo se ha reducido del 74% al 47% en el último año en los Estados Unidos. En Alemania (del 72% al 45%) y en Francia (del 65% al 37%) los porcentajes de reducción de la desconfianza son similares. Los más confiados del mundo en este sentido son los chinos, solo el 26% desconfía de la seguridad de los coches autónomos.
Además de la propia seguridad, la privacidad y el uso de la ingente cantidad de datos que el coche autónomo y conectado generan, 4.000 gigas por coche al día, es el otro gran motivo de preocupación. Un 76% de los alemanes temen que sus datos personales sean vulnerables con esta tecnología. En el polo opuesto, un 71% de los chinos está dispuesto a compartir esos datos. El 75% del público cree que los coches autónomos tienen el peligro de ser hackeados.
Un 51% de los usuarios a nivel mundial quiere que su próximo coche equipe sistemas de conducción autónoma, pero en una mayoría no pagarán más por un vehículo autónomo que por uno convencional.