MOTOR

Fin de la aventura en Panda

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Seis de los siete equipos ourensanos presentes en esta edición  de la competición cumplieron su objetivo de llegar a Marrakech

Punto y final a la décima edición de la Panda Raid. Finalmente fueron seis de los siete equipos ourensanos inscritos (Ana Babarro y Lidia Vázquez abandonaron) los que cubrieron el exigente recorrido de una competición solidaria que reunió a más de 350 vehículos.

La cara positiva de la competición fue para los vigentes campeones, Jano Fraga y Jesús Miguel Varela, que a pesar de una dura etapa final lograron la victoria en la categoría 4x2, finalizando además entre los primeros clasificados de una ficticia general con los 4x4.

Al final, tal y como narra Jano Fraga una traicionera loma se interpuso en el camino de los ourensanos. "Fue en la última viñeta del roadbook. Era una trialera de apenas 30 metros ya muy trillada por el paso de los 4x4 y nos quedamos patinando. Perdimos un tiempo valioso que nos hizo caer en la general con los otros coches, pero estamos contentos porque repetimos triunfo en nuestra categoría en una Panda Raid que ha sido realmente dura, la más complicada que recordamos".

A pesar de la fatídica recta final, el balance es "muy bueno. Da un poco de rabia porque fuimos por delante de los 4x4 durante casi toda la prueba, pero así son las carreras. ".

Los otros cinco equipos restantes terminaron la prueba sin mayores problemas que algún contratiempo mecánico sin importancia, incluido tener que abrir por la fuerza el maletero del coche de Ruti y Pablo, al atascarse por la arena el mecanismo y algunos problemas con la bomba de la gasolina en los coches de Gerardo y Alberto y Pepe y Carlos. También afloraron las emociones en el equipo formado por Javi y Richard, por una delicada situación personal sufrida días antes de iniciarse la prueba.

Ana y Lidia, abandono en la última

Menos suerte tuvieron Ana y Lidia. En la penúltima etapa abrieron la dirección y tras la reparación las cosas fueron a peor en la última jornada. El paso de los kilómetros hizo mella en su Panda y tuvieron que abandonar con problemas de motor, que no aguantó la dureza de una competición tan exigente.

Todavía en la grúa camino de Marrakech, Ana destacaba que "intentamos terminar la etapa, pero fue imposible. Nos agobiamos un poco al abandonar por estar con problemas lejos de casa aunque ya está, todo solucionado. Ahora nos arreglarán el coche para volver a casa. Ha sido una experiencia genial".

Al final, cena de gala y entrega de premios a los intrépidos ourensanos que se enfrentaron a la prueba, con el firme deseo de volver a experimentar la soledad y el toque de adrenalina de la Panda Raid.

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