En sus diferentes "test" el vehículo es sometido a temperaturas entre -35º y 50º Celsius
El Mercedes EQC recala en el desierto almeriense, después de haber pasado por Alemania, Finlandia, Suecia, Italia, Dubái, Sudáfrica, EE. UU. y China, para realizar su puesta a punto antes de iniciar su fabricación en cadena. Mercedes cuenta con un programa exhaustivo de pruebas para cada serie de vehículos y poder validar su calidad, antes de iniciar su producción .
Después de realizar las pruebas realizadas durante el de invierno, superadas con éxito y donde se sometió a temperaturas de -35º, el EQC afronta en Almería pruebas que son fundamentales en un vehículo eléctrico, como su aire acondicionado, la capacidad de carga y refrigeración de su batería y de sus unidades de control, con altas temperaturas. También su comprueban apartados como su dinámica de conducción, comodidad o como el fino polvo se deposita en sus componentes comprobando el sellado del vehículo.
A estas pruebas, se suman las diferentes en el apartado digital, desde la simulación de accidentes, aerodinámica, conducción, ruido, vibraciones y resistencia, hasta pesos, consumo de combustible y su capacidad de autonomía.
Antes de ser lanzado para la producción, el vehículo debe ser probado y validado por numerosas personas de muchos departamentos de desarrollo diferentes. Un total de varios cientos de expertos están involucrados en las pruebas. Desde los departamentos especializados, que aprueban sus componentes y módulos, hasta las pruebas de resistencia del vehículo completo, utilizando para ello más de 200 prototipos.