La venta en el mercado español está fijada para junio con un precio desde los 127.450 euros
El mejorar la Clase G ha supuesto para Mercedes un complicado encargo, al tener que perfeccionar sus prestaciones en carretera y fuera del asfalto, como su confort y su equipamiento telemático.
El nuevo clase G se presenta con 53 milímetros más de longitud y 64 milímetros más de anchura, lo que le proporciona entre otros un mayor espacio interior para los ocupantes. Un interior en el que llama la atención la calidad de sus materiales, así como su pantalla de 12,3 pulgadas. que integra toda la información del vehículo, dentro del campo visual del conductor.
El nuevo Clase G supera su leyenda todoterreno con mejoras en su amortiguación y ejes, consiguiendo datos como una capacidad de ascensión de hasta un 100%, siempre que el piso tenga suficiente adherencia, un vadeo en agua de 70 centímetros y una inclinación lateral de hasta 35º, entre otras características.
Los conductores del nuevo Clase G tienen disponible el Dynamic Select, que pulsando un botón pueden elegir el programa de conducción Comfort, Sport, Eco o Individual. Los cuales se combinan con el sistema G-Mode, que activa uno de sus tres bloqueos de diferencial o acopla la desmultiplicación para todo terreno Low Range.
El nuevo Mercedes Clase G 500 equipa un motor V8 de 4,0 litros que desarrolla 422 CV, asociado a una caja de cambios 9G-Tronic, adaptada exclusivamente para este vehículo, ofreciendo un par máximo de 610 Nm entre las 2.000 y 4.750 rpm y un consumo mixto de 12,1 l/100 km y unas emisiones de Co2 de 276 g/km.
