El alaricano se vio obligado a abandonar en la segunda pasada por Esgos por una rotura de motor cuando rodaba en la tercera posición de la general
El alaricano Javier Pardo era la gran baza del automovilismo ourensano en esta edición del Rally y su abandono, cuando rodaba en la tercera posición, cayó como un jarro de agua fría sobre los aficionados.
Transistor en mano, los miles de seguidores, volcados aplaudiendo el paso Pardo, pasaron a un silencio tenso e incertidumbre al ver que no llegaba a la meta de Esgos.
Con el varapalo ya asumido, quedándose con el buen rendimiento hasta el abandono y con la cabeza puesta en Ferrol, Pardo destaca que "el primer día creo que hicimos una prueba muy inteligente. En el primer bucle del viernes pagamos un poco una mala monta de neumáticos pero en el segundo estuvimos al nivel que queríamos. Fue un poco sorpresa terminar en la tercera posición en la primera jornada. Ya hoy (por ayer) comenzamos en Esgos con problemas de dirección asistida, que se repitieron durante todo el bucle y ahí sufrimos un poco. En la asistencia lo resolvimos más o menos pero en el segundo paso por Esgos el motor dijo basta en el kilómetro ocho más o menos".
La parte positiva, mostrarse como la auténtica alternativa de los vehículos R5 en el Rally de Ourense. "Sí, así es. Abandonar siempre duele, especialmente cuando corres en casa delante de los tuyos. Teníamos un ritmo muy bueno, la verdad es que fastidia bastante. De todas formas hay que quedarse con el buen rendimiento que tuvimos hasta el abandono. El ritmo que tenemos actualmente es muy bueno, estamos por delante de Joan (Vinyes), que es increíble porque tiene muchísima experiencia y también estamos compitiendo con Pernía, que es una lástima que también tuviese que abandonar", destaca.
Con toda la información ya almacenada y ordenada, Javier Pardo hace un balance "más que positivo por la paciencia y el nivel que demostramos, especialmente en la primera jornada, cuando todo era súper complicado. Supimos conservar en los sitios delicados y atacar en el momento justo. El ritmo fue muy bueno y creo que no perdimos la concentración en ningún momento. Eso es lo bueno y lo que nos da confianza" y concluye destacando que "esperemos que en Ferrol no llueva (se ríe). Es un rally que se me da bien, en el que disfruto mucho y en el que intentaremos seguir creciendo dentro del coche, haciendo kilómetros y acumulando experiencia".
