El futuro de Ogier, Latvala y Mikkelsen son solo algunas de las claves que se abren tras la posible salida de la firma alemana del Wrc
¿Y ahora qué? La noticia de Autosport en su edición digital ha dejado fríos a todos los seguidores del mundial de rallys. Aficionados, periodistas y algún que otro piloto mostraban a primera hora de la mañana del martes su estupor por una noticia que nadie esperaba. Volkswagen dejará el Mundial de rallys al terminar la temporada 2016
Atras, cuatro años, doce títulos y una superioridad pocas veces vista en el Mundial de rallys moderno. En la calle tres pilotos contrastados y con caché, ingenieros, mecánicos y un grupo de trabajadores que han llevado a la marca de Wolfsburgo a lo máximo dentro de la competición. Sin embargo, ¿Qué ha motivado este 
cambio en la política de promoción de los alemanes? No hay que buscar mucho para darse cuenta que el caso de las emisiones ha dejado seriamente tocada a la empresa, no en materia económica (la inversión en el competición del grupo es tan solo una gota de agua en el mar de dinero que mueven), sino por la imagen de cara al gran público.
Con grandes pleitos en marcha, resulta en cierta medida comprensible el cambio hacia otros campos, en este caso la Fórmula E a través de Audi (cuyo proyecto en el Mundial de resistencia también ha muerto después de una trayectoria brillante).
¿Ogier, Latvala y Mikkelsen?
Volviendo al futuro y a falta de una confirmación oficial de la marca, seguramente ni los propios pilotos conocen donde estarán el año que viene. De tener un contrato firmado en el mejor equipo, a tener que buscar asiento, cosas del mercado laboral moderno, pensarán algunos.
El gran premio es Sébastien Ogier. Cuatro veces campeón del mundo y en el paro. De todos es sabida la buena relación entre el francés y Malcolm Wilson pero resulta difícil saber como podría convencer el bueno del magnate de los negocios al chico de Gap para estar como mínimo un año con ellos en M-Sport.
La posibilidad de Citroën también es real pero el plantel de pilotos está cerrado (Meeke, Breen y Lefebvre) y su salida del equipo en 2011 (protagonizó varios episodios de rebeldía combinados con grandes resultados) le ponen las cosas complicadas en una estructura en la que todavía existe la larga sombra del otro Sébastien, Loeb.
Más lejana es la opción Toyota (casi nulas parecen las opciones de Hyundai, con el equipo más consistente del campeonato), que sí parece tener los ojos puestos en cualquiera de los otros dos pilotos, Jari Matti Latvala y Andreas Mikkelsen. Sin un primer espada, Latvala podría ser el hombre de Toyota en su retorno al Mundial, 18 años después. A un paso de su casa y con la confianza de Tommi Mäkinen, todo parece encajar.
Mikkelsen por su parte conoce bien M-Sport y junto con Tanak podría hacer una de las grandes parejas del mundial, siempre y cuando Ogier no llegue a Ford, ya que la opción de la retirada del francés también es una opción para un piloto que no ha dudado en mostrar su descontento con la normativa y distintos aspectos relativos a la gestión del Campeonato del Mundo de rallys.
Qué será de los Polo WRC 2017 construidos?
También falta saber que sucederá con las 'mulas' de test del equipo y la inversión realizada. Quizá ese es el menor de los problemas del equipo. Al igual que ocurrió con el Logan S.2000, el Audi Gr.S o la práctica totalidad de los Mitsubishi construidos, estos coches pasarán al desguace. Volkswagen nunca ha estado realmente interesada en poner sus coches en manos privadas, así que como mucho, se conservará la última de estas unidades 2017 construidas para situarlas en algún rincón del museo de la marca criando polvo.
¿Y el golpe al Mundial?
El más grande, sin lugar a dudas. El WRC se ha beneficiado de forma más que notable de la presencia de Volkswagen en el campeonato. Su llegada en 2011 con el Fabia S.2000 supuso un enorme impulso al campeonato, que languidecía por la falta de marcas presentes. Ahora, cuando todo apuntaba hacia el resurgir del certamen, con cinco marcas, las dudas vuelven a asomar, especialmente si se tiene en cuenta que nadie sabe que sucederá con los antiguos WRC y si habrá finalmente un buen campeonato de privados.
A falta de dos meses para iniciar el campeonato llega una noticia que deja a todas las partes temblando. Muchas incógnitas que harán de esta pretemporada, una de las más interesantes de los últimos años.
