Varios grupos de cigarrones ensayan ya los recorridos para habituarse al peso de las chocas
Verín ya respira ambiente de Entroido. Desde hace varios días los vecinos de la localidad escuchan por las noches el sonido de las chocas, y es que varios grupos de cigarrones ensayan ya los recorridos y se habitúan al peso de uno de los complementos más significativos del traje que lucirán cuando dé comienzo el ciclo del carnaval. "Hay que tener en cuenta que llevan muchísimo peso a la espalda y no pueden cogerlo en frío ni de un día para otro. Empiezan corriendo y van poniendo kilos progresivamente. Sólo llevan las chocas y el látigo para ir cogiendo movimiento. Más que un ensayo es un entrenamiento", explica la responsable de Cultura de Verín, Emilia Somoza.
Desde el Concello, los responsables de la organización del evento prevén que el programa definitivo se pueda presentar en poco más de una semana y al pasar la celebración de San Antón, aunque, aseguran, distará poco de los de años anteriores. "Cambiará en aspectos como los nombres de las orquestas, pero el pregón será, nuevamente, durante el Corredoiro", explica Emilia Somoza. "El año pasado lo hicimos así y tuvo mucho éxito, a la gente le encantó porque se pudo hacer una fiesta muy familiar. Se está convirtiendo el algo típico que las familias coman juntas ese domingo aprovechando el primer paseo grande de los Cigarrones. Creo que fue una buena decisión cambiar el pregón para ese momento", añade.
Sobre quien será la persona encargada de inaugurar el Entroido de manera oficial en la villa verinesa, la concejala aseguró que prefieren mantener un poco la expectación, aunque adelantó que se tratará "de una persona del pueblo y muy involucrada con él. Vamos a darle un poquito de emoción, pero sabemos que a la gente le va a gustar".
El Entroido de Verín se prolongará este año del 21 de febrero -jueves de Compadres- al 5 de marzo, pero los cigarrones se podrán ver, previsiblemente, el día 17 de enero con San Antón. "El año pasado sí que salieron, normalmente siempre sale alguno si hace buen tiempo y no llueve. Lo hacen al bajar del monte de comer el chorizo. Es como una especie de preludio, un paseíllo, sobre las 19,00 horas", añade.
Evitar la masificación
El Concello de Verín aun no ha cifrado de manera exacta la inversión total para la festividad, pero partirá, en todo caso, de los 120.000 euros. "Siempre partimos de la misma cantidad e intentamos quedarnos un poquito más cortos y no pasarnos", apunta Somoza.
El objetivo del gobierno local es que la villa disfrute de la fiesta sin caer en la masificación. "Nuestra meta no es cargar Verín de gente porque ya está viniendo mucha. El Entroido es nuestro, y nosotros lo enseñamos pero queremos disfrutarlo y si se masifica, impedimos esto", opina la edil de Cultura.
