TRIBUNALES / OURENSE

Diez acusados por una trama de droga que operaba en Verín

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photo_camera En la operación antidroga desplegada en Verín, la Policía Nacional intervino cuatro vehículos.

La fiscal sitúa en la cúspide a un pontevedrés supuestamente dedicado a la venta a media y gran escala 

Diez personas serán juzgadas en la sección segunda de la Audiencia por un delito de tráfico de drogas a mediana escala (transporte, venta y distribución) que desencadenó en una macroinvestigación policial que duró un año, entre febrero de 2010 y 2011. En las diligencias también estuvo imputado en un primer momento un guardia civil, J.C.G.C., pero la fiscal reclamó el sobreseimiento al entender que era un mero consumidor que compraba cocaína a alguno de los encausados. Tampoco halló pruebas de que pasase información policial a la trama.

La acusación pública sitúa a la cabeza de la organización criminal al pontevedrés José Antonio D.G., a quien imputa en la venta de 1.002 gramos de cocaína de gran pureza (87,3%) a Ángel L.C., operación en la que, según añade, medió Jorge A.V., quien presuntamente trabajaba como lugarteniente del primero. Ángel L.C. fue uno de los primeros en ser detenido el 19 de julio de 2010 en Medina de Rioseco (Valladolid) cuando circulaba por la A-52. Llevaba la cocaína bajo el asiento delantero izquierdo del coche que conducía.

Pero, según el ministerio público, José Antonio D.G. también suministraba a Miguel Ángel G.M., alias Mortadelo, para su posterior venta al menudeo a consumidores u otros distribuidores a nivel intemedio de Verín. De hecho, los investigadores aseguran que cuatro de los imputados, Carmen D.S, alias Sevillana, su pareja Vicente A.D. y los dos hijos de la primera,Jonathan M.D. y Verónica M.D. (regentaba una peluquería), eran quienes supuestamente vendían en la villa del Támega la cocaína que conseguían a través de Miguel Ángel G.M.

La Policía Nacional cree que este último se valía de su profesión de panadero para encubrir sus actividades ilícitas, utilizando los vehículos de la empresa familiar.

En el transporte y distribución al menudeo realizadas por Miguel Ángel, según dice la fiscal, "colaboraban estrechamente Antonio José G., en alguna ocasión llegó a realizar funciones de coche lanzadera, y Jesús Luis B., alias Suso, un hombre de su máxima confianza.

La policía atribuye a Miguel Ángel G.M. los 37,6 gramos y la balanza de precisión introducidos en un tubo cilíndrico que halló el 29 de mayo entre unas zarzas en las inmediaciones de una finca propiedad de su familia, en Caldeliñas.

En la entrada y registro en su cada de la calle Luis Espada, aparecieron 100 gramos de cocaína , una báscula de precisión así como 370 euros y una pistola y munición.

El juzgado autorizó el registro en una casa en Caldeliñas (Verín) que era utilizada por Miguel Ángel G.M., en donde había una pistola de aire comprimido, cartuchos y bolsas de envasar al vacío.

Y se registró la casa familiar de Carmen D.S., sus dos hijos y su pareja Vicente A.D. en la avenida de Castilla. En el interior del buzón de correos de portal, había envoltorios con 7,3 gramos de cocaína así como cannabis repartido por la casa. A los agentes policiales les llamó la atención la suma de dinero en efectivo que había en el piso, un total de 25.695 euros. En la cocina, apareció un calcetín con 19.900 euros y otro con 3.000.

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